“Campeones, campeones”, ya cantan en Balaguer
1- La familia y amigos de Robert Martínez vibraron ayer con la clasificación de Bélgica para semifinales 2- Cánticos contra Neymar en una noche histórica
Ayer, a 3.800 kilómetros de Kazán (Rusia), 4.600 por carretera, se celebró una gran fiesta a eso de las 22 horas. Fue en Balaguer, la capital de la Noguera y tierra natal de Robert Martínez, el hombre que ha llevado a Bélgica a sus primeras semifinales de un Mundial desde 1986. Allí, en el restaurante El Parador, familia, amigos y vecinos del técnico entonaron el “campeones, campeones” cuando el árbitro pitó el final del Brasil-Bélgica, con histórico triunfo para los ‘diablos rojos’ por 1-2.
En Balaguer se cantaron los goles de Fernandinho en propia meta y Kevin de Bruyne, en honor de su Bob Martínez, con tanto entusiasmo sin duda como pudieron hacerlo en un pub cercano a la Grand Place de Bruselas. En el restaurante regentado por Antonio y Rafa, en el que siempre siguen los partidos de Bélgica, Roberto (padre de Robert Martínez) y Antonieta (su hermana) presenciaron el encuentro en primera fila. La madre del técnico catalán prefirió verlo en casa pero se encargó de que junto al televisor no faltaran dos velas rojas encendidas. Todo para que a la selección que dirige Robert Martínez le salieran muy bien las cosas anoche ante Brasil. En el restaurante se dio cita también Pau Prior, el hijo de Antonieta y tercera generación de esta familia de entrenadores: a los 24 años dirige al Artesa de Segre.
En los 90 minutos vibrantes del partido entre los ‘diablos rojos’ y la pentacampeona mundial, en Balaguer no sólo se celebraron los goles. De Neymar se acordaron también: “Ay, ay, ay, canta y no llores...” y “¿donde está, Neymar, dónde está?” fueron cánticos que se oyeron. Mucha emoción al final. Bélgica ya está en semifinales. Francia la espera. Anoche Balaguer estuvo muy cerca de Bruselas y de Kazán