Los informes que validaron a Arthur
Cury alertó de su clase y Robert y Urbano se enamoraron de su finura con el balón y de su capacidad para organizar y distribuir... y para darse aquella vuelta que se daba Xavi con el balón ‘secuestrado’.
El primer amistoso del Barça 2018-19 ha dejado a un futbolista muy bien parado: Arthur Melo (21 años). El golazo que le metió al Tottenham y su buena actuación general en los 45 minutos que disputó han ilusionado a los culés. Una flor no hace primavera, pero mejor empezar bien. Y Arthur lo ha hecho. En ese medio partido, el brasileño dejó destellos de las virtudes que han llevado al Barça a apostar fuerte por él.
Los informes técnicos del Barça previos al fichaje de Arthur dicen de él cosas muy buenas y también algunas otras en las que debe mejorar. Pero pesaron más las positivas. André Cury alertó de su calidad desde Brasil, Robert y Urbano se enamoraron de él en vídeo primero y en directo después, y Pep Segura validó su fichaje cuando tuvo que decidir entre él y Goretzka. Valverde, pese a gustarle más los jugadores expertos y no ver claro lo de fichar a un sudamericano que no ha pasado por Europa, está muy contento con lo que está viendo.
Lo que destacaron los técnicos de Arthur antes de ficharlo fue, por encima de todo, su calidad. Que tiene un pie derecho con un gran toque y que es muy técnico. Gustó que es finísimo en el pase, tanto en corto como en largo, y se destaca su enorme precisión. El gol no es su fuerte pero tiene un buen disparo por su puntería y potencia. Eso sí, tienen claro que marcar no es su principal virtud.
De Arthur también se destacó su capacidad mostrada en Gremio para organizar el juego de su equipo, así como su buena visión periférica. Antes de recibir el balón se hace un mapa de cómo está el resto del equipo ubicado en el campo para elegir la mejor opción.
Otro de los fuertes de Arthur, decisivo en su fichaje, es su capacidad para girarse sobre sí mismo con rapidez con el balón controlado. Salvando las distancias, es capaz de dar la clásica vuelta de Xavi con la pelota en sus pies y que también saben ejecutar Messi, Iniesta y Busquets. En cambio, eso no lo tienen otros medios de nivel como Rakitic o Paulinho, que tienen más problemas para revolverse manteniendo el balón controlado. Si reciben de cara a la portería rival pueden brillar, pero si controlan de espaldas tienen problemas para salir del acoso del contrario por sí solos.
También gustó mucho de Arthur que se ofrece siempre a sus compañeros, sabe que el juego parte de él y lo asume. Es joven pero tiene personalidad y sabe que él debe surtir los pases finos a los atacantes. En la final de la Libertadores dio un recital en el estadio de Lanús ante un entusiasmado Robert. A nivel personal, Arthur es un chaval humilde, con buenos valores, y que ha crecido en una familia con una estructura sólida. Su padre, su madre y su hermano son sus primeros fans. Pero claro, Arthur no es perfecto. En este sentido se destaca de él que a nivel defensivo tiene que mejorar. En el Barça los medios deben contrarrestar el trabajo de presión que los delanteros no hacen en algunas fases y el brasileño, pese a ser un jugador de toque, no debe ser una excepción. Rakitic debe ser su espejo. También alertó Robert de que hay que tener paciencia con él, dado que el ritmo del juego en Brasil es diferente que en Europa, más lento y por tanto menos exigente a nivel físico. En Europa se juega más rápido y Arthur debe coger el tono adecuado para que los partidos no se le hagan largos. Además, debe adaptarse a competir con la máxima presión: la externa (los rivales y el entorno), y la interna (la del propio vestuario).
También se avisó de que quizás Arthur necesitará cuatro o cinco meses para adaptarse a la cultura futbolística del Barça, de ahí la insistencia técnica en avanzar su llegada. El brasileño puede recordar en detalles a Xavi, ahora hace falta que se crea que puede llegar a su nivel y al de su gran ídolo, Iniesta