El Espanyol hace lo justo para ganar
El equipo de Rubi se impuso ayer al Nàstic en el penúltimo amistoso del verano gracias a dos genialidades de Baptistao y Borja Iglesias
El Espanyol hizo ayer lo justo para saldar con victoria su quinto amistoso de la pretemporada. Gracias a dos genialidades de Baptistao y Borja, el equipo blanquiazul se impuso al Nàstic, un triunfo sin brillo en un duelo muy espeso por parte de ambos contendientes.
Rubi extrajo las conclusiones que le faltaban de cara a mover la plantilla. Tarragona era la fecha límite para las pruebas y a partir de hoy se agilizarán las salidas. Ayer jugaron todos menos Roberto y Javi López y el técnico pudo ver qué piezas pueden ser prescindibles en su proyecto, ya que más de uno no dio el do de pecho.
Rubi alineó de salida a un once plagado de los jugadores que tuvieron pocos minutos en el anterior amistoso. No viajaron a Tarragona los tocados Granero, Sergio Sánchez y Pedrosa, mientras que el técnico dio descanso a David López y Sergio García.
El Nàstic salió más enchufado que un Espanyol al que le costaba enlazar tres pases seguidos, espesos en la creación. Así el primer aviso lo dio el local Tete con un disparo que salió alto (6’). El equipo perico se sacudió la embestida local y empezó a llegar con fluidez, asociándose de lujo, aunque siempre romos en los metros finales. Duarte (11’) y Puado (13’) firmaron las primeras incursiones pericas.
Pero el Nàstic, más vertical , generaba más peligro. En el 20’, Barreiro se sacó un buen cabezazo.
El calor y la humedad reinante ralentizaban el juego de ambos equipos, espesos en la creación. En el 23’, Álvaro tuvo una buena ocasión para haber abierto el melón, pero en el mano a mano el portero local le ganó la partida.
Poco a poco el Espanyol se fue entonando, trenzando con mayor criterio. No llegaban con soltura pero fueron poniendo cerco a la meta grana. Así en el 41’ llegó el gol de Baptistao, previa brillante combinación al primer toque entre Marc Roca, Puado y Piatti.
Tras el descanso, el Espanyol saltó con mayor brío, eléctrico. Así en el 46’ Álvaro tuvo el 0-2 pero tardó mucho en rematar.
El Nàstic se fue arriba, buscando el empate y encerró al Espanyol, que empezó a acusar el cansancio, aunque ninguno de los dos daba una con derechas. En el 67’ se produjo la jugada más polémica pues en un rifirafe entre Víctor Sánchez y Fali, el segundo dejó ir un manotazo al capitán perico. El colegiado no lo dudó y expulsó a Fali, viendo Víctor la amarilla.
Rubi dio entrada a Darder y Borja Iglesias en el 71’ y apenas tres minutos después los dos gestaron una de las jugadas más lúcidas. A la contra, pase filtrado de Darder y Borja, tras dejar sentado al portero, envió el balón al fondo de la red. Poco había hecho el Espanyol, pero los dos goles fueron de bella factura ante un Nàstic voluntarioso pero sin gol