¿Quien fichó a Arturo Vidal?
¿Fueron las vacas sagradas con Messi al frente? ¿Fue Ernesto Valverde? ¿Tenía el club suficientes informes sobre el carácter del jugador chileno?
Profesional desde 2004 y jugando en Europa desde 2011, todo el mundo sabía cómo era Arturo Vidal dentro y fuera del campo. Su fichaje por el Barça se justificó en base a la necesidad de dotar de carácter al equipo y en la nunca demostrada petición del vestuario. Unos apuntaban directamente a Valverde, otros a las vacas sagradas. Los cracks, en determinados partidos, querían más contundencia en la media. Y, sí, Vidal tiene una pierna fuerte.
Dos meses después de la llegada del chileno, su nombre ha sido portada un par de veces no por su juego sino por sus reacciones desmedidas en las redes sociales. Salidas de tono que han provocado la reacción del club a través de su máximo responsable técnico. Pep Segura ,enun café para todos, le pidió más respeto para sus compañeros, para el entrenador y para el club. Paralelamente, en Miami donde Chile prepara el partido de hoy contra Perú, el seleccionador Reinaldo Rueda pidió a Vidal que tuviera cordura y equilibrio en el Barcelona.
Difícil, la verdad, que un futbolista de 31 años con la personalidad y recorrido del guerrero nos regale un cambio radical. Es verdad, como poder ser, puede ser que lo dé. Se trata pues de ver si asume, y cómo asume, que siendo titular en todos los equipos en que ha jugado hasta ahora, sea claramente suplente en el Barcelona. Una situación que no parece vaya a ser distinta de manera inmediata. Puede tener minutos en muchos partidos, pero no es fácil imaginarle indiscutible en el centro del campo.
A todo esto, y con todo esto de las redes sociales sobre la mesa y el toque que le ha dado Segura, nos volvimos a preguntar quién había fichadoa Vidal. Más concretamente, si era cierto que se trataba de una petición del entrenador o del vestuario, porque resultaba paradójico que Valverde no estuviera alineando a un futbolista que él había pedido expresamente. La respuesta es no. Ernesto no pidió específicamente a Arturo Vidal. El chileno fue un fichaje de la secretaría técnica... que el entrenador no rechazó. Lo que nos cuentan, con etiqueta de cierto y verdad, es que antes de firmarle se le presentaron al míster todos los informes elaborados sobre Vidal y en los que se incluían las opiniones de personas que habían compartido el vestuario con Arturo a lo largo de los dos últimos años. Y Valverde, siempre según la versión del club, no puso impedimento. Lo aceptó como antes había aceptado a Dembélé, Lenglet, Arthur, Semedo, Malcom y cualquiera de los fichajes realizados las dos últimas campañas. Es decir, desde que Ernesto se sentó en el banquillo.
Por cierto, al míster que según explican sólo ha pedido posiciones y no nombres, se le atribuye una petición personal en su primera temporada: Iñigo Martínez. Y al club se le atribuye también una reacción inmediata a esa reclamación: con Mascherano en la plantilla no era razonable traer otro central. No hemos podido confirmar nada de eso. Ni tampoco desmentirlo. La realidad es que el ‘Jefecito’ plantó al Barça a media temporada, en el mercado invernal, para irse a jugar a China y el entonces marcador de la ReSociedad acabó fichando por el Athletic de Bilbao