Un lugar para la reacción
Ipurua es un escenario que se le ha dado bien a los rojiblancos cuando más lo necesitaban
El encuentro de este fin de semana es determinante para el Athletic y también para el proyecto de Eduardo Berizzo. Ipurua se convierte en un escenario de obligada reacción inmediata, porque de lo contrario el equipo puede entrar en barrena. Está en puntos de descenso y entrar en esos puestos de castigo supondría estar con viento gélido en el cogote. Además, viendo cómo está el calendario, con tres encuentros en una semana, el horno no está para bollos y sí para encontrar soluciones radicales. Por lo que dice la reciente historia en los encuentros en el campo eibartarra, el recinto ha deparado alegrías a los leones y además en momentos delicados para su trayectoria en la Liga, bien fuera por aprovisionarse de oxígeno y para calmar las aguas, bien por mantenerse en la pelea por los puestos europeos. Falta hará que se reediten estas experiencias.
En la temporada 2014/15, la situación no era nada boyante para el conjunto de Valverde, que estaba renqueante en ese momento, aunque aceleró en una segunda vuelta reactivadora. Llegaba al feudo guipuzcoano con solo 27 puntos después de 24 jornadas: estaba a cinco puntos del descenso –la referencia era el Levante- y a ¡17! del sexto clasificado, que era el Villarreal. Afortunadamente, el Athletic había ganado con agonía el domingo anterior a Rayo (1-0) y en Eibar firmó un triunfo, el segundo consecutivo por tanto, que le dio mucho aire. Gurpegi puso el definitivo 0-1 con un buen cabezazo. Fue el 1 de marzo de 2015. El equipo venía del varapalo sufrido ante el Torino en la Europa League en Bilbao. En solo tres días le dio la vuelta a una situación cuando menos dura.
Después de esa jornada en Ipurua, el equipo de Valverde se colocó décimo, a 8 puntos del descenso y a 15 de Europa. Más tarde llegaron las victorias consecutivas ante el Real Madrid (1-0), Celta (1-2) y Almería (2-1), que hicieron que los rojiblancos se catapultarán de tal manera que al acabar la competición liguera pudieran llegar a Europa. Los leones terminaron séptimos, con 55 puntos después de una muy buena segunda vuelta.
In extremis
En la temporada 2016/17 pasó algo similar, aunque en esta oportunidad los leones no acudían con el agua al cuello con el descenso pisándoles los talones. El conjunto de Valverde seguía en la pelea por Europa. Era la jornada 33 del 24 de abril de 2017. El Athletic acudía en la sexta plaza a la cita con 53 puntos, uno menos que el Villarreal, que era quinto, y uno más que la Real Sociedad, séptima.
Un tanto a ultimísima hora de Raúl García en el minuto 93 en un escorzo casi imposible dio el triunfo después de un gran sufrimiento. Al término de esa jornada los puestos no cambiaron para nada. Eso sí, se siguió la racha –los leones habían ganado 5-1 a Las Palmas unos días antes-. Betis y Celta fueron las siguientes víctimas del Athletic tras caer 2-1 y 0-3, respectivamente. ¿Dónde acabó el equipo? Fue séptimo y se clasificó para Europa, mejor dicho para las previas. La Real Sociedad le arrebató la sexta plaza a ultimísima hora en Balaídos. Los 63 puntos bilbaínos no fueron suficientes para la clasificación directa.
Si fuera por los precedentes, la cita de Ipurua de este domingo invita al optimismo, pero ojo que el Athletic puede pagar muy caro una tarde desafortunada
El primer triunfo le dio oxígeno y empuje para la pelea europea, como el segundo