El Valverde más decisivo
Tras cuatro jornadas de Liga sin ganar, el técnico ha mostrado su parte más intervencionista y ha dado la vuelta que necesitaba el grupo
A Ernesto Valverde se le complicó de manera inesperada el final de septiembre. El Barcelona encarriló tres partidos sin ganar, dos empates en casa y una derrota en Butarque. Empezaron a surgir dudas. El Barça necesitaba un arreón, un cambio de rumbo. Y la figura del técnico incluso se puso en entredicho.
Pero el propio Valverde fue capaz de darle la vuelta a su Barça. Ya le salió bien el movimiento en casa frente al Athletic, en un primer intento de frenar la mala dinámica. Le dio la oportunidad a Munir y el delantero igualó el partido (2-2).
Pero el gran cambio llegó en Wembley, un punto de inflexión para el equipo y para el propio técnico, que dio con la tecla. Con la entrada de Arthur en el centro del campo encontró el equilibrio que buscaba. Entonces, el gran sacrificado fue Dembélé. La versión culé mejoró a pesar de que al siguiente partido se empató en Mestalla, donde los azulgrana merecieron más.
El parón de octubre dio aire al Barça antes de una semana muy complicada. Sevilla, que llegó líder al Camp Nou, Inter y Madrid eran pruebas definitivas. Y el equipo culé las superó con nota y sin Messi lesionado frente a los de Machín (2-4). La apuesta táctica sin el 10 salió bien contra el Inter. Valverde apostó por Rafinha y el brasileño abrió la lata frente a sus excompañeros (2-0).
En el Clásico, el Barça siguió creciendo hasta endosarle una manita al Madrid. Aunque tuvo que volver a intervenir el técnico con cambios que dieron resultado inmediato cuando más apretaban los blancos. Sacrificó a Rafinha, Arthur y Coutinho.
Puso a Semedo de lateral con Roberto pasando al centro del campo para frenar la banda izquierda rival. Y Dembélé para acabar de romper el choque. Además, Valverde va gestionando el fondo de armario y dio minutos a Vidal, que marcó el quinto frente al Real y jugó el choque entero ante la Cultural.
Arturo salió de nuevo en Vallecas. Fue un recurso porque Valverde entendió que el partido pedía contundencia. Volvió a prescindir de Arthur y Cou y entraron Arturo y Munir poco después de que lo hiciera Ousmane por Rafinha. Entre los tres cambios, acabaron con el fantasma de Butarque y con un gran Suárez remontaron el duelo