Djokovic exhibe nº 1 destrozando sin piedad a Isner
El pentacampeón arranca en el Masters doblegando en dos sets al ‘novato’ estadounidense
Novak Djokovic estrenó en pista el recuperado nº 1 mundial que tomó de Rafa Nadal matemáticamente el lunes día 5 e inauguró en competición ayer superando al estadounidense John Isner, 6-4 y 6-3 en 1h.13’, en la jornada inaugural del Grupo Guga Kuerten de las Nitto ATP Finals, el Masters del O2 Arena de Londres.
La primera gran ovación de la noche fue para un invitado especial, el futbolista de la Juventus Cristiano Ronaldo, acompañado a pie de pista por su pareja, Georgina Rodríguez, y su hijo mayor, Cristiano Jr. Pero enseguida las miradas se centraron en ‘Nole’, 31 años y aspirante serio a igualar los seis títulos en Masters de Roger Federer.
Está de dulce el serbio, aun con la reciente derrota en la final del Masters 1000 ATP de París ante el ruso Karen Khachanov. Si no hay proceso gripal o traspié físico por medio, Djokovic es el rival a batir en la que es su undécima presencia en el evento que cierra la campaña individual.
Campeón en 2008 y de 2012 a 2015, sumó su 32º triunfo, por 11 derrotas, frente a un novato a sus 33 años, un Isner que conoce el privilegio de competir en esta cita por obra y gracia de las bajas por lesión de Nadal y Del Potro.
Un extraordinario resto de derecha cruzada supuso el primer ‘break’ para Djokovic, 3-2 en la manga inicial. Todo un aviso de autoridad que fue plasmando sin inmutarse. Los 13 ‘aces’ de Isner, el más veterano debutante desde Andreu Gimeno con 35 en 1972 y Ken Rosewall con 36 en 1970, no inmutaron a uno de los grandes restadores de este deporte.
Además, ‘Nole’ no concedió una sola opción de rotura con su sólido servicio. Caminó sin desgaste hacia el triunfo en una hora y 13 minutos. Total superioridad. Mañana, duelo frente al otro ganador del grupo, el alemán Alexander Zverev, que batió 7-6 (5) y 7-6 (1) a Marin Cilic, remontando en ambos sets para alivio de su legendario entrenador, Ivan Lendl, que en el inicio tuvo que aguantar desde la grada los desfíos de su enfadado pupilo.
Hoy, turno del Grupo Lleyton Hewitt, de despejar la incógnita Roger Federer, que ante Kei Nishikori perdió en do sets, un resultado que no había conocido el suizo en sus 46 encuentros previos de liguilla en sus ya dieciséis participaciones. A sus errores no forzados, 34, añadió una actitud preocupante, como si le faltara capacidad de reacción, incluso hambre de victoria, cuando a la posibilidad de ganar el Masters por séptima vez (no levanta el trofeo desde 2011) une el aliciente de que sería su corona ATP número 100.
Aumentó el misterio entorno al helvético de 37 años al cancelar ayer el entrenamiento en el O2 Arena, la víspera de afrontar un choque clave frente al austríaco Dominic Thiem, no decir adiós a la opción de meterse en semifinales, una ronda que sólo no alcanzó en 2008.
El de Basilea tiene un balance de 15-0 en segundos encuentros de ‘round robin’ en este evento, por 2-0 Thiem, que perdió los primeros y últimos partidos en 2016 y 2017. Entre ellos, su cuarto enfrentamiento, primero desde que en 2016 Dominic ganase en la tierra de Roma y la hierba de Stuttgart, tras haberse impuesto Roger en Brisbane
Federer no entrena la víspera del vital duelo contra Thiem