Solo puede quedar uno
El Espanyol no ha cedido aún puntos en casa y el Girona no ha perdido todavía fuera
El domingo en Cornellà-El Prat se verán cara a cara el mejor local, el Espanyol, frente a uno de los mejores visitantes de LaLiga Santander, el Girona, que se dice pronto. Los dos llegan a la cita del RCDE Stadium con una racha envidiable bajo el brazo y sólo uno acabará el esperado derbi catalán con el récord intacto. Una racha quedará abortada en feudo perico.
Alicientes no le faltarán al duelo. El Espanyol afronta el derbi con la aplaudida vitola de ser el único equipo del campeonato que no ha cedido todavía ni un sólo punto de su casa en lo que llevamos de Liga: 5 partidos jugados como local, 5 victorias, 15 puntos, números inmaculados y que sostienen el brillante arranque de un conjunto perico que está enamorando hasta el momento.
Pero aterriza en feudo perico un Girona intratable a domicilio. El equipo de Eusebio no ha perdido hasta ahora, ningún partido lejos de Montilivi. En cinco encuentros como visitante, el Girona ha firmado dos victorias y tres empates, o lo que es lo mismo, 9 puntos.
El Espanyol ha hecho de su campo un fortín temido, pues además de no haber cedido ni un punto, apenas encaja. En los cinco encuentros jugados, sólo ha recibido un tanto, el mejor registro de todos los equipos de Primera hasta la fecha en casa. Defensa sólida y olfato goleador afinado exhiben los de Rubi, apoyados por una afición maravillada con este inicio.
Curiosamente, el Girona a domicilio también se está mostrando como una muralla en defensa, clave para haber firmado unos registros de ‘chapeau’ fuera. El conjunto de Eusebio sólo ha encajado tres goles como visitante, siendo el equipo de toda LaLiga que menos dianas ha recibido a domicilio, en lo que llevamos de campeonato, pues hasta Barcelona (6) o Sevilla (9) han encajado más.
El derbi será además, un duelo especial para más de un participante que ha militado en ambos equipos. Para empezar Rubi, pues el técnico perico estuvo en el Girona y tiene buen recuerdo de su estancia en Montilivi. Al igual que Stuani, con grato pasado perico.
El vestuario perico, además, recuerda aún el 0-1 que hace un año el Girona arañó de Cornellà-El Prat. Hay ganas de desquitarse