El base Kemba Walker, la nueva sensación de la temporada
Lleva dos partidos seguidos con 60 y 43 puntos
Kemba Walker, base de los Hornets de Charlotte, es la nueva sensación de la NBA. Después de meter 60 puntos el pasado sábado, su mejor marca en la liga estadounidense y de la presente temporada, en el partido que los Hornets perdieron en la prórroga ante Philadelphia 76ers (119122), Walker le metió 43 puntos en la victoria de su equipo por 117-112 a los Celtics de Boston.
Walker anotó 21 puntos en el último cuarto y acabó el partido con 14 canastas de 25 tiros de campo, incluidos siete triples de 13 intentos, Walker es el primer jugador que consigue superar la barrera de los 40 puntos después de firmar 60 desde que Kobe Bryant lo logró en 2006-07. Antes lo habían logrado Tracy McGrady (2003-04), Michael Jordan (1989-90), Pete Maravich y Wilt Chamberlain. En total, Walker ha firmado 103 puntos en dos partidos en un periodo de dos días.
Walker, que mide 1,85, es el segundo jugador de esa estatura que logra anotar 60 puntos (el otro fue Allen Iverson). Este próximo verano acaba contrato –será agente libre sin restricciones– , así que no es de extrañar que su futuro esté en boca de todo el mundo. A sus 28 años y con unos Hornets que no acaban de conseguir rodearle de talento, es posible que cambie de aires.
Walker, nacido en el barrio del Bronx, en Nueva York, el 8 de mayo de 1990, es ahora mismo el máximo anotador de la NBA, con 29,6 puntos por partido, por delante de LeBron James, Joel Embiid y James Harden. A eso le añade 4,4 rebotes y 6,1 asistencias, todo ello en 35,3 minutos en cancha.
Fue elegido en la novena posición del ‘draft’ de la NBA de 2011 por Charlotte Bobcats, que posteriormente pasaron a llamarse Hornets. En octubre de 2014, amplió su contrato por cuatro años y un total de 48 millones de dólares