Victoria ‘feita en A Madroa’ ante el colista
El Celta ganó al Huesca con dos goles de Iago Aspas
El de siempre, Iago Aspas, firmó un doblete en la victoria del Celta ante el Huesca en un partido entre equipos necesitados de puntos, los gallegos para poner tierra de por medio con la zona de descenso y los oscenses para romper la racha de 12 partidos, ya 13, de LaLiga sin vencer desde agosto, en la jornada inicial.
Salió el Celta, con la idea de fútbol ofensivo de Cardoso, en el que los laterales recorren la banda entera y el portero tiene prohibido sacar en largo. En frente, el Huesca de Francisco ordenado y con idea, pero desmoralizado por los resultados.
La primera parte en el desaforado Balaídos transcurrió entre el dominio del Celta y el intento oscense de aprovechar las grietas en defensa, especialmente con salidas a la contra. Las ocasiones, tibias, se sucedieron por ambos lados, con un Boufal especialmente activo entre los celestes.
El partido se calentó con el paso de los minutos, sobre todo tras una entrada dura de Musto a Iago Aspas que encendió a los pocos espectadores presentes en Balaídos, contra el árbitro Cordero Vega y contra el equipo, necesitado de resultados. Pero la crispación dio paso a la euforia cuando, en un jugadón ‘feito en A Madroa’, Hugo Mallo tiró una pared a Brais en el interior del área del Huesca y cedió a Iago Aspas que sólo tuvo que empujar el balón al fondo de la red. Un gol forjado por canteranos con el que se llegó al descanso y premió la valentía local.
Tras el respiro, Francisco mejoró a su equipo con dos cambios y el Huesca se hizo con el control, pero el Celta también fue mejor a la contra y en una de ellas Iago Aspas cazó un balón larguísimo en carrera, se deshizo con un taconazo de Akapo, que se lesionó, la pisó para sentar a Jovanovic y la cruzó para matar al Huesca y dar oxígeno al Celta