Operación central
El Barça se ve abocado a ir al mercado de invierno tras la nueva lesión de Vermaelen, que estará un mes KO, y dada la incertidumbre con Umtiti
El Barça se ha visto irremisiblemente empujado a ir al mercado de invierno para fichar o lograr la cesión de un central, diestro para más señas, que complemente la plantilla azulgrana. A los ya conocidos problemas de rodilla de Samuel Umtiti (25 años) se unieron ayer los de Thomas Vermaelen (33 años). El belga sufrió ante el Levante una rotura en el sóleo de la pierna derecha y se perderá el próximo mes de competición. Al menos están por medio las vacaciones de Navidad, pero Thomas es reincidente y apunta a baja en la eliminatoria de Copa contra el Levante.
Además, conociendo sus antecedentes tampoco esperan en el club que pueda jugar muchos partidos seguidos en caso de que Piqué o
Lenglet sufran un percance. Valverde era reacio a fichar pero las circunstancias mandan
El club ya estaba trabajando desde hace semanas en una prospección del mercado y este última lesión de Vermaelen no hace más que apuntalar la decisión de ir a por un defensa central. El club tiene varios perfiles controlados y el ofrecimiento de varios futbolistas. Entre ellos, fue ofrecido Diego Llorente, central de la Real Sociedad internacional a las órdenes de Luis Enrique. También han sido ofrecidos Jorge Meré (Colonia) y Christensen (Chelsea). Sin embargo, ninguno de ellos colma por ahora las expectativas de los técnicos azulgrana.
El Barça debe acabar de decidir cuál es su objetivo. El ‘timing’ de la operación queda supeditado a la apertura del mercado de invierno, a partir del próximo 1 de enero. Además, hay que resolver el tema de la financiación porque, oficialmente y a día de hoy, no hay dinero para fichar. Sin embargo, dadas las circunstancias, habrá que buscarlo o utilizar medidas imaginativas para hacer realidad una incorporación que ya es obligatoria si se quiere aspirar a ganar Liga, Copa y Champions.
Una posible solución sería hallar la cesión con opción de compra condicionada al rendimiento del futbolista en cuestión. Algo que no es fácil que acepten los jugadores y los clubs. Todo el mundo quiere asegurar el tiro en este sentido.
También existe la posibilidad de que el Barça ingrese una cantidad por la salida de Denis Suárez, un futbolista que quiere abandonar la disciplina azulgrana en el próximo mercado de invierno. Una inyección de dinero proveniente de una hipotética venta del gallego que podría venir bien para financiar la.
Según la información de MD, el Barça maneja nombres de futbolistas jóvenes, veteranos y de mediana edad. Sin embargo, en el club prefieren no tirar de un jugador demasiado inexperto ni tampoco de uno excesivamente mayor dado que el riesgo de repetir situaciones físicas como las de Vermaelen no quiere correrlo nadie para no quedar en evidencia una vez se haya incorporado un refuerzo. Además, lógicamente debe ser un jugador con buen manejo de balón