La hija de Murillo ‘firmó’ su contrato
Celeste quiso acompañar a su padre en el momento de rubricar su nuevo acuerdo como central del Barcelona
A pesar de llegar como cedido y por solo seis meses –aunque con una opción de compra de 25 millones de euros a final de curso– Jeison Murillo (Cali, 27 de mayo de 1992) fue presentado con todos los honores. Con 2.014 aficionados animados por el ‘speaker’ Pep Callau en la tribuna del Camp Nou, gran parte de ellos colombianos afincados en Barcelona, y su familia arropándole. Esta vez estuvieron su mujer, sus suegros y su cuñado, que no quisieron perderse la puesta de largo del nuevo central del FC Barcelona. Tampoco faltaron la cúpula directiva y ejecutiva de la entidad culé. Junto al presidente Josep Maria Baromeu, asistieron el vicepresidente deportivo, Jordi Mestre; el CEO Óscar Grau, el mánager general de fútbol, Pep Segura y el secretario técnico, Eric Abidal, como más destacados.
El acto empezó a las 11 horas y, antes de saltar al terreno de juego y pisar por primera vez el césped del Camp Nou vestido de corto para realizar los habituales toques con el balón, el defensa colombiano pasó por la Llotja Presidencial Suñol para rubricar su firma en el contrato que lo vincula al Barça, de entrada, hasta junio de 2019.
Durante esta escena institucional se vivió una simpática escena protagonizada por Celeste, la hija del jugador colombiano. Esta se encontraba andando por la sala hasta que el presidente Bartomeu la llamó. La niña no dudó en sentarse en el regazo de su padre e incluso agarrar el bolígrafo para intentar dibujar su garabato en el contrato de su padre. Un gracioso momento que se convirtió en la anécdota de la presentación del internacional cafetero.
Tras la firma, Murillo salió al palco donde saludó por primera vez a los aficionados y firmó algunas camisetas. Posteriormente, bajo al vestuario para equiparse de azulgrana, con su dorsal 17, y salir al césped del Estadi sobre las 12 horas. Tomó el balón y se dispuso a realizar concretamente 13 toques. Sin ninguna floritura, sin demasiados riesgos. Acto seguido, le esperaba un grupo de canteranos del Prebenjamín azulgrana con quien
El presidente Bartomeu y la cúpula deportiva acompañó al central colombiano
2.014 aficionados, muchos colombianos, le dieron una calurosa bienvenida
empezó un rondo, aunque costó que los chavales le pasaran el balón al nuevo futbolista culé, que tuvo la deferencia de acercarse a una aficionada en silla de ruedas que aguardaba a la derecha de los banquillos.
Finalmente, Murillo firmó algunos balones aunque no los chutó a la grada. Y a diferencia de otras presentaciones, esta vez tampoco llegó el coche del patrocinador del club. Tendrá que esperar a ver si se lo traen los Reyes Magos