Joan, Sandro, correremos juntos en libertad
Sant Esteve Ses Rovires, Can Brians 2. Un grupo de nueve presos ha completado con marca la Media Marathon de Vilanova. Maria, la técnico de deportes de la prisión catalana, les ha enseñado que con el running pueden ser mejores personas, que el deporte ayuda a cambiarte la vida y ellos se han subido a esa ola que lleva hacia la libertad. A Maria se le ocurrió organizar el año pasado una carrera de 10 kms. con salida y llegada a Can Brians en beneficio del Hospital Sant Joan de Deu y la lucha contra el cáncer infantil. Recaudaron 8.820 euros, nadie quiso perderse esa carrera que bajo el lema ‘Corre en gran’ (corre en grande) supone un paso a la reinserción verdadera, un paso para prepararse para la libertad.
Maria te envuelve con esa determinación de las mujeres fuertes. Lleva cuatro años y medio trabajando entre presos. Contagia vida, les aseguro que esta mujer es capaz de cambiar el mundo porque los pequeños logros son fundamentales, básicos, y en su entorno, muy humanos.
Está preparando el grupo la segunda edición de la carrera solidaria. Será el 24 de marzo, organizada de nuevo por ‘Gambaders Events’ y destinará los beneficios íntegros a la investigación de la ELA, esta enfermedad degenerativa tan dura y cruel. Las autoridades penitenciarias han apostado desde el inicio por un proyecto que habla de los esfuerzos por hacer de estos centros de reclusión un paso para la reinserción.
El padre de Joan murió de ELA. A él cuesta poco arrancarle una sonrisa y que su mirada te traspase el corazón. Ha perdido peso, ha aprendido inglés, se está enganchando al yoga que practica los fines de semana porque entre semana se ocupa de la limpieza. Como Sandro ,su compañero de celda. Joan Besolí lleva 18 meses en prisión preventiva por supuestamente formar parte de una organización criminal que ocultó dinero desviado de la CBF, la Confederación Brasileña de Fútbol, una entidad privada que no sólo no ha denunciado irregularidad alguna sino que además está encantada con el trabajo que hizo en su día el amigo de Joan, Sandro.
Rosell ha perdido peso pero ni un ápice de su fuerza, de su carisma, de su personalidad. Si no hubiera sido presidente del FC Barcelona seguramente no estaría viviendo una experiencia que es tan surrealista como angustiosa. Prisión preventiva. Por un supuesto delito de blanqueo de dinero. Segundas navidades vividas entre rejas, un año más que verá asomar en una celda al lado del que es ya su hermano, con el que se pelea cada día y ríen, y sueñan que llega el día en el que les devuelven ese bien que no aprecias hasta que te lo roban: la libertad.
El 25 de febrero es la fecha marcada para el juicio en Madrid, antes trasladarán a los presos preventivos a la capital con sus abogados preparando un juicio que sólo pedimos sea justo.
Sandro, Joan, el 24 de marzo correremos la carrera. En libertad. Disfrutando de esos fenómenos de ‘Egoísmo positivo’ que integran al running a personas disminuidas psíquicas o físicas que tienen un espíritu participativo y una alegría que te hacen llorar de felicidad. Correremos empujando una de esas sillas de ruedas o ese artilugio que se ha inventado Alex que permite a personas con discapacidades graves sentir lo mismo que siente un runner. Correremos al lado de otros presos que ya están cerca de vivir de nuevo en sociedad. Correremos con Maria y con todos los que piensan que el deporte ayuda, en cualquier ámbito de la vida. Correremos para recaudar fondos para la lucha contra la ELA y convocaremos a todos nuestros amigos para que la corran con nosotros. Correremos juntos y en libertad. Y Joan podrá abrazar a su hijo. Y tú podrás abrazar a todos los que cada día han soñado con este momento