Que no estamos tan bien
Estamos asistiendo al espectáculo de la Liga más loca de los noventa años de la competición. Se acabaron los campeonatos en que se alcazaba la suma de los cien puntos, o el de las diferencias insultantes entre los dos de arriba, que competían entre ellos por el título, con aplastante superioridad del Barça, con siete de diez ganados en la última década. Mientras el resto se lo miraban, con alguna puntual aparición del Atleti, para que no se dijera que la autoproclamada mejor Liga del mundo era solamente cosa de dos, como la de Escocia. Después de un fin de semana delirante en que los blaugrana se fueron a dormir el sábado con las malas sensaciones de haber jugado los peores noventa minutos de la temporada, pero reforzados en el liderato, a la espera que Madrid hiciera buenos los pronósticos contra el Girona. Pero cuando menos se esperaba saltó la sorpresa en el Santiago Bernabeu, donde los de Eusebio, muy necesitados, pincharon el globo de la racha victoriosa de los de Solari, que caen a la tercera posición a nueve puntos de la cabeza. A las puertas del Tourmalet que representa encadenar cuatro desplazamientos consecutivos a Lyon, Sevilla y Madrid, por partida doble, en tres competiciones diferentes (Champions, Liga y Copa), la situación es óptima para el equipo de Valverde, pero con la sensación del juego en los últimos partidos no se corresponde con los números que aparecen en la clasificación.
Así pues, mañana contra el Olympique de Lyon, al “loro, que no les embauquen, que no estamos tan bien” •