Ramos: agresión a Messi impune
Golpeó a Leo en la cara de forma deliberada sin que ni Undiano ni Mateu desde el VAR lo sancionasen; antes le zancadilleó también sin castigo
Alberto Undiano Mallenco (45 años) salió al Santiago Bernabéu a que no se le fuese el partido de las manos. Y lo cierto es que empezó fuerte pero al poco se arrugó. El colegiado navarro, que se retira este año, sólo tardó dos minutos en amonestar a Sergio Busquets por una entrada a Gareth Bale. Era merecida. Nada que objetar. Sin embargo, a partir de ahí al árbitro se le encogió el brazo a la hora de mostrar cartulinas.
El joven Reguilón, que tampoco se ha ganado todavía el respeto de nadie en Primera División por una mera cuestión de inexperiencia, se permitió atizar tres zurriagazos casi seguidos a Rakitic (2) y Sergi Roberto. Nada. Ni rastro de tarjeta. Tampoco cuando el canterano blanco, a la media hora de juego, se pegó un piscinazo en el área buscando el penalti. También ahí fue benévolo Undiano Mallenco. El listón que había puesto con la primera falta de Busquets ya había variado de altura: para amonestar a alguien ya estaba por los cielos.
Pero lo gordo llegó al final de la primera parte. En el minuto 41, Ramos, quién si no, zancadilleó a Messi con su zorrería habitual. El argentino se le fue por enésima vez y , cuando le superó por detrás suyo, estiró una pierna a ras de suelo para zancadillear al ‘10’ del Barça. Falta meridianamente clara, Messi por los suelos... y Undiano mirando a otro lado. Falta sí, tarjeta no.
Pero cuando ya se hizo el ‘longuis’ de forma escandalosa el árbitro navarro fue al filo del descanso, cuando en una disputa por un balón el capitán blanco golpeó de forma innecesaria y gratuita con su brazo izquierdo en la boca a Messi. Un golpazo innecesario, malintencionado y que deja en mal lugar al capitán blanco. Leo empezó a sangrar por la boca y se encaró, cabeza con cabeza, con Ramos, encendido como pocas veces. Pero Undiano, que estaba muy cerca de ambos, tampoco tiró de tarjeta pese a las protestas de los jugadores del Barça. Tampoco Mateu Lahoz le indicó que era acción punible desde el VAR. Un dislate que, de nuevo, deja mal a los árbitros y a su protocolo del vídeoarbitraje. En la mejor Liga del mundo (?) pegarle al mejor jugador de la historia sale gratis. Ya le pasó a Marcelo cuando le partió el labio a Messi y a Pepe cuando le pisó cobardemente en una mano mientras estaba en el suelo con el juego parado. Siempre en el Bernabéu