En buenas manos
→ No hay jugador del Liverpool que no pase en algún momento por la camilla del fisioterapeuta Jose Luis Rodríguez
→ “Intento evitar hablar de fútbol cuando los chicos se estiran en la camilla porque mi opinión vale más bien poco”, dice Jose Luis Rodríguez Robledo, fisioterapeuta español del Liverpool. Acostumbrado al universo paralelo en el que habitan, prefiere derivar sus conversaciones a temas cotidianos. No pretende ser padre de nadie sino de aportar otras perspectivas: “Son chavales que se han perdido cosas. Hay catástrofes y no se enteran a menos de que hables con ellos”, asegura.
No hay futbolista que no pase en algún momento por sus manos en Melwood, cuartel general del campeón de Europa. La sala de tratamiento es casi un lugar de culto en el que no solo se abordan lesiones sino también confidencias: “Te hablan de sus frustraciones y bromean contigo. A ese nivel da igual si eres mejor o peor. Si no encajas, estás fuera”, reconoce.
Hijo de torero, creció junto al ruedo y trabajó con Cayetano Rivera: “Fui el primer fisioterapeuta que hubo en una cuadrilla en España. Era un gremio cómodo, sabía cómo moverme y conocía todos sus códigos. Pero tuve la necesidad de abandonar la zona de confort”, explica. Edu Mauri, entonces médico del Espanyol, se fue a trabajar a Aspetar, uno de los centros de medicina deportiva más prestigiosos del planeta. No dudó un instante. Logró su teléfono, le envió su currículo y al poco tiempo se instaló a vivir en Qatar.
Estuvo allí durante casi una década. Hasta que su mente le pidió otro reto. Otra aventura: “No me gusta aburrirme”. agrega. En ese momento la propiedad del Liverpool empezó a introducir roles similares a los que existen en la NBA, con figuras como la del jefe de rendimiento. Contrataron a Philipp Jacobsen para esa tarea y tras él llegó Jose Luis a un club que con Klopp en el banco respira optimismo. A la espera de que se arregle la crisis del coronavirus, sueña con pasearse con la Premier por las calles de Liverpool ●
En la sala de tratamiento no solo se abordan lesiones sino también confidencias