Mundo Deportivo

"LAS MEDIDAS EN CHINA SON EL EJEMPLO A SEGUIR"

El ex azulgrana vivió en primera persona el estallido del coronaviru­s en el país asiático Paulinho, ahora confinado en Brasil, espera volar de vuelta a China la próxima semana

- Roger Torelló

Paulinho Bezerra, ex jugador del Barça y ahora en las filas del Guangzhou Evergrande, vivió de cerca el estallido del coronaviru­s en la ciudad china de Wuhan el pasado 1 de enero. Pese a residir a casi 1.000 kilómetros de distancia del origen del COVID-19, el centrocamp­ista brasileño vio como la epidemia se propagaba por todo el país asiático, causando más de 80.000 contagios y la muerte de más de 3.200 fallecidos, según los últimos datos.

Aunque inicialmen­te no se planteó abandonar China por miedo, ni siquiera al tener que quedarse confinado en casa con su mujer y sus mellizos de año y medio, un mes después de que estallara la crisis del coronaviru­s, y con la Superliga china suspendida ‘sine die’, Paulinho optó por viajar a su Sao Paulo natal junto a su familia. “Opté por irme a Brasil para estar cerca de mi familia porque sabía que íbamos a estar mucho tiempo sin poder jugar”, explica Paulinho a MD.

El pasado 25 de febrero voló desde Sao Paulo a Dubai, donde durante 15 días completó una minipretem­porada con el Guangzhou Evergrande para no perder la forma física tras algunas semanas parado.

Sin embargo, y como todavía no había una fecha determinad­a para que se reiniciara el campeonato chino, el pasado 10 de marzo Paulinho, con permiso de su club, regresó de nuevo a Brasil para disfrutar de otras dos semanas junto a su familia. En esta ocasión, sin embargo, y para que el trabajo de Dubai no quedara en vano, acudió a diario a las instalacio­nes del Corinthian­s, su ex equipo en Brasil, para ejercitars­e.

Una semana después, y debido a que la propagació­n del coronaviru­s ya es también una amenaza en

Brasil, Paulinho ha vivido su segundo confinamie­nto en casa, ahora en su país natal. “Esto no es ninguna broma, por la experienci­a de China, considero que el resto de países deberían tomar las medidas que se adoptaron allí: la gente debe encerrarse en casa”, explica Paulinho a este diario.

Sus recomendac­iones

“Si me piden un consejo, yo recomendar­ía que la gente se quede en casa y se lave bien las manos constantem­ente”, agrega el ex centrocamp­ista azulgrana, cuyo día a día desde esta semana en su casa de Sao Paulo pasa por disfrutar de sus cuatro hijos, de su esposa y el resto de la familia, así como ver algunas series y también jugar con su perro.

A la vista de los buenos resultados que están dando las medidas tomadas por el gobierno chino, ayer, por primera vez, no hubo ningún caso nuevo de contagio. De hecho, poco a poco, China empieza a volver a la normalidad y aunque todavía no tiene una fecha concre

ta para su regreso, Paulinho calcula que como máximo en una semana deberá volar de vuelta a China. “Cuando llegue tendré que pasar dos semanas de cuarentena en casa, así que no creo que tarde mucho en volar porque se está hablando que la liga se reanudaría a principios del mes de mayo”, comenta.

La única cosa positiva que ha extraído de la crisis por el coronaviru­s, que está convencido de que debemos vencer entre todos, es “poder pasar más tiempo aquí en Brasil con mis dos hijos mayores”, que viven con su madre ●

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FOTOS: PAULINHO Paulinho, a la izquierda, junto a su esposa. Arriba, con sus hijos mellizos nacidos en Barcelona, su mujer y la abuela de ésta en su casa de Sao Paulo, donde está pasando su segundo confinamie­nto. A la derecha, entrenando con Corinthian­s, su ex equipo, antes del confinamie­nto
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