Bale no reacciona tras el parón
→ El jugador galés volvió a mostrarse apático e intrascendente en la media hora que disputó ante el Eibar en el regreso del Real Madrid a Laliga
→ La nueva normalidad no va con Bale, que a tenor de lo visto ante el Eibar sigue haciendo números para salir del Real Madrid el próximo verano por mucho que su agente declare que es feliz con su vida en la capital.
Como si el tiempo no hubiese pasado, el delantero galés evidenció la misma apatía y la misma nulidad en el juego que antes del parón por la pandemia de coronavirus. En los 30 minutos que estuvo sobre el terreno de juego en el reestreno liguero ante el Eibar sustituyendo a Rodrygo, el Expreso de Cardiff volvió a pasar totalmente desapercibido, algo que ya fue la norma en los partidos previos a la suspensión de la competición.
Por si fuera poco, Bale acabó el choque con una sobrecarga aunque su presencia no peligra de cara al partido contra el Valencia porque en el entrenamiento de ayer en Vadebebas trabajó al mismo ritmo que sus compañeros.
Su pobre actuación invita a pensar que Zinedine Zidane preferirá optar por otros jugadores más implicados, caso de Rodrygo, Vinicius o Asensio, que no pudo jugar contra el equipo armero pero se espera que lo haga en alguno de los próximos compromisos del equipo blanco.
Sin chispa
En la media hora que jugó ante el Eibar, Gareth Bale no hizo nada destacable, tal y como reflejan los datos de Opta. A pesar de que el Eibar dejó mucho espacio a su espalda en busca del 3-2 que le metiese de lleno en el partido, ni el galés ni Vinicius fueron capaces de hacer daño al contragolpe. Al brasileño, aunque fallón, se le vio implicado y voluntarioso, nada que ver con la falta de ambición que volvió a mostrar el Expreso de Cardiff.
Aunque el Real Madrid bajó mucho su nivel en el segundo tiempo, Bale fue incapaz de tirar del carro del ataque blanco. Solo pudo completar 7 pases de los 11 que intentó, perdió cinco balones y, lo que es más grave, no generó ni una sola ocasión, no chutó a portería, no regateó y no dio ni un pase clave mientras estuvo sobre el campo. Unos guarismos que evidencian que la actitud del galés no ha cambiado a pesar de que en la nueva normalidad de la puerta cerrada no recibirá los pitos de su propia afición. Ese factor parecía jugar a su favor pero, con público o sin él, Gareth Bale parece incapaz de activarse y ser útil para sus compañeros.
Superado en la rotación
La abundancia de delanteros que tiene el Madrid en nómina es el último
obstáculo para Bale. Aunque Zidane se niegue a tirar la toalla y le sigue brindando oportunidades, las alternativas que maneja en ataque son muy amplias.
Rodrygo y Vinicius se han mostrado con más ímpetu a pesar de destacar poco el domingo pasado y las recuperaciones de Eden Hazard y de Marco Asensio seguramente dejarán a Bale sin algunos de los minutos que se le presuponían.
En la nueva normalidad, nada ha cambiado para el apático Gareth Bale ●
APAGADO
El galés no chutó ni regateó una sola vez contra el Eibar
COMPETENCIA Hazard, Asensio, Rodrygo y Vinicius le pueden quitar más protagonismo