¿Que pasa, Joao?
Es la pregunta que se hacen los aficionados del Atletico tras su actuacion ante el Mallorca, donde no brillo y se marcho enfadado al ser sustituido por Simeone
“¿Qué pasa, Joao?” Es la pregunta que se hacen todos los aficionados del Atlético de Madrid tras el choque del viernes frente al Mallorca. El portugués regresó al once inicial después de haber sido suplente en el Camp Nou. Y lejos de mostrar su mejor nivel, protagonizó una desilusionante actuación. Sin gol. Sin chispa. Y lo que más preocupa. Sin alma.
Joao Félix tuvo menos movilidad que en anteriores citas y, dentro del área, no estuvo nada fino. Tuvo dos ocasiones claras en la primera parte, pero no encontró puerta. Y en la segunda, en una contra, en vez de encarar y disparar aguantó más de la cuenta la llegada de un compañero para dársela. Todo lo contrario que había hecho en los últimos encuentros, donde había pecado de egoísta para desesperación, sobre todo, de Diego Costa. Tal vez eso le pesó en la cabeza a la hora de elegir.
Antes de la hora de juego, Simeone decidió sustituirle. Y el cambio no sentó nada bien al portugués. Ya sea por enfado con el entrenador o consigo mismo por el partido realizado, el jugador se marchó por la otra parte del campo y fue caminando hasta el banquillo dando la vuelta al terreno de juego cabizbajo, con cara de pocos amigos. Cuando llegó al córner, cogió un baló y le dio un puñetazo para mandarlo a la grada. Vacía, claro.
El técnico habló del luso en sala de prensa a la conclusión del choque para suavizar las cosas. “Tuvo un golpe ante el Alavés. Está tratando de buscar su mejor forma. En todos los partidos tiene ocasiones importantes para convertir y esperemos que, con calma y tranquilidad, pueda encontrar esa calidad que tiene y pueda marcar, que es lo que le entusiasma”, aseguró el argentino. Pero lo cierto es que Joao está lejos de su mejor nivel. Y eso que en su primer partido post-confinamiento, firmó una gran actuación. Dos goles hizo en Pamplona ante Osasuna, el primero resolviendo a la perfección en el área con un gran disparo y el segundo aprovechando el regalo que le hizo Diego Costa para sólo empujar el balón. Tal vez lo que el luso debía haber hecho en las siguientes citas y no hizo.
Después de la cita de El Sadar, fue titular ante Valladolid y Alavés, ambos en el Metropolitano, y suplente ante Levante y Barcelona, a domicilio. Cuatro encuentros sin ofrecer una buena versión, algo preocupante teniendo en cuenta que el luso parecía haber remontado el vuelo justo antes del parón, con sus tantos ante Villarreal y Sevilla.
En lo que va de curso, Joao Félix ha disputado 33 partidos con el Atlético de Madrid (27 como titular) en los que ha hecho ocho goles y tres asistencias. Es el segundo máximo realizador del equipo tras Morata, pero al luso se le pide mucho más. Ya no por los 127 millones que costó, sino por la calidad que atesora.
Pero más allá del rendimiento deportivo, son los gestos del portugués lo que menos gusta a la hinchada colchonera. Joao debe mejorar dentro del terreno de juego. Y recapacitar fuera de él ●
El luso se fue bien antes del parón y regresó con dos goles, pero luego se ha apagado