Valentino Rossi celebra su podio con más moto
Quizá los tiempos en que el italiano Valentino Rossi era un firme candidato al título mundial de Motogp pasaron, pero lo que no ha perdido a sus 41 años son las ganas de seguir siendo un piloto profesional, y después de regresar a un podio el pasado 26 de julio en el circuito de Jerez, al ser tercero tras Fabio Quartararo y Maverick Viñales, no se ha dedicado al ‘dolce far niente’ ni a deleitarse con su trofeo.
Junto a los cachorros de la VR46 Academy, a la que inspira y quienes le motivan a seguir siendo competitivo, se encerró en el circuito de Pomposa para seguir mejorando sus habilidades sobre una Yamaha R1 y preparar la siguiente cita de Brno (República Checa) de este fin de semana.
Lo dijo cuando él y tres de sus chicos subieron al podio en el último GP en Jerez: “Hemos llegado muy preparados a este inicio de la temporada. Me ayudan mucho cuando estoy frustrado por un mal resultado, siempre están empujándome y estar con ellos me hacen menos viejo, más joven”. Y, además de una cena con risas en Da Rossi en Tavullia, se encerraron en plena canícula en el circuito de Pomposa en la localidad costera de San Giuseppe.
Y es que se les viene encima un triplete Brno-red Bull Ring-red Bull Ring y vale la pena seguir invirtiendo esfuerzos con el buen fin de seguir con la racha tras esos podios de Celestino Vietti 8Moto3), Luca Marini y Marco Bezzecchi (Moto2) y el propio Vale. Y con ellos Stefano Manzi y Andrea Migno para subirse al carro del podio en el momento menos pensado.
Luca Marini y Valentino Rossi, hermanos por parte de madre, se llevan 18 años. Están juntos en el Mundial desde 2016 y solo una vez antes de este Jerez-2 habían coincidido ambos en el podio en un mismo Gran Premio. Fue en Sachsenring en 2018 y entonces
Marini fue tercero en Moto2 y Rossi segundo en Motogp. Esta vez Marini segundo en Moto2 y Rossi tercero en Motogp ●