Asisat Oshoala explica su vida en primera persona
→ Desvela detalles desconocidos para la mayoría
→ La jugadora del Barça femenino Asisat Oshoala ha narrado su historia en la web del club barcelonista, con un reportaje biográfico escrito en primera persona en una sección de la web denominada precisamente así, ‘En Primera Persona’. Oshoala recuerda su vida familiar en Nigeria, su interés por el fútbol y las etapas de su carrera. Este es un fragmento del escrito de Oshoala, en el que describe cómo vivió el confinamiento y sus orígenes familiares:
“El confinamiento fue difícil para mí, porque estuve sola casi cuatro meses en Barcelona. Estaba encerrada en casa y al principio tenía miedo porque, evidentemente, no quería coger el virus. Durante dos meses prácticamente no salí de casa, sólo bajaba a comprar en el supermercado, ¡y al llegar inmediatamente tiraba toda la ropa a lavar! Fue un periodo loco para mí. También seguí entrenando por la incertidumbre sobre qué pasaría con la Liga y la Champions League.
“Como pasaba tanto miedo, hablaba muchas veces por teléfono con mi familia; mi madre, mi padre, mis hermanas, mis amigos... Fue importante poder mantener el contacto con ellos a través de videollamadas. Además, la situación en Nigeria tampoco era buena, especialmente en mi ciudad, Lagos, la capital del país.
Mis padres son comerciantes. Mi familia es polígama. Sé que en Europa esto sorprende, pero en mi país es una situación normal; en una sociedad musulmana el hombre puede casarse con más de una mujer. Lo vivo con naturalidad porque siempre lo he visto así. Mi padre tiene dos esposas, una de las cuales es mi madre. Tengo siete hermanos, dos de las cuales son hijas de mi madre y cinco de la otra mujer de mi padre.
Soy muy activa en las redes sociales para estar conectada con mi familia. Como aquí paso muchos ratos sola, también utilizo Twitter e Instagram para interactuar con la gente y así divertirme. ¡Me encanta!. Creo en Dios. Rezo, pero no me cubro el cabello siempre. Sólo a veces o en casa. Obviamente, en mi trabajo no puedo llevar velo. También hago el Ramadán. ¡Este año ha sido más fácil de seguir porque coincidióconelconfinamiento!” ●