Hortelano, con un tirón, se retira
ATLETISMO → Récord de Europa de Warholm en 400 m.v. y tres mejores marcas mundiales en Estocolmo
→ La británica Laura Muir en 1.500 m, (3’57”82), la ucraniana Yaroslava Mahuchick en altura (2 metros) y el sueco Armand Duplantis, recordman mundial, en pértiga (6,01) establecieron ayer en el Meeting de la Diamond League en Estocolmo tres mejores marcas mundiales del año, aunque el gran protagonista de la reunión fue el noruego Karsten Warholm quien volvió a confirmar su condición de gran estrella del atletismo al fijar un nuevo récord de Europa de los 400 vallas, con un tiempo de 46”87, en una prueba en la que sólo un inoportuno tropezón en el último obstáculo le privó de rebajar la plusmarca universal.
El español Bruno Hortelano tuvo que retirarse lesionado de la final de los 200 metros y sufre un “tirón” en el isquiotibial de la pierna izquierda, según informó su representante, Alberto Armas. Luego Hortelano declaró que “he notado que se me subía el isquio, me ha dado un pequeño tirón y para evitar el tirón gordo he decidido ya dejarlo. Creo que ha sido una buena decisión”, en redes sociales. “Desafortunadamente en la última serie del calentamiento he notado algo en el isquio, pero llega un momento en el que no se puede hacer nada. Esto es una ‘Diamond League’ y no vas a renunciar a correr, así que he salido y he intentado lo mejor que he podido”, añadió.
Quien sí puso concluir su participación, y de manera brillante, en la capital sueca fue la catalana Esther Guerrero, que logró una meritoria séptima plaza en los 1.500 metros, tras pulverizar su mejor marca personal. Guerrero, que llegaba a Estocolmo con un mejor registro de 4:05.70, rebajó en más dos segundos su plusmarca personal, tras firmar este domingo un crono de 4:03.13 minutos.
Tres puestos más adelante, en la cuarta posición, concluyó Jesús Gómez su participación en la final de los 1.500, tras firmar un crono de 3:33.46 minutos.
Y el noruego Warholm, cuando iba lanzado a por el legendario récord del mundo (46”78) del estadounidense Kevin Young, vigente desde los Juegos de Barcelona 1992, tropezó al saltar la última valla y perdió un tiempo precioso. Un percance que no pudo impedir, sin embargo, que Karsten Warholm rebajase en 5 centésimas la plusmarca europea que él mismo poseía ●