Un líder de vuelta a casa
→ El Sevilla busca con el suizo-croata los valores de alguien que sea un referente en el vestuario, algo clave con la salida de Banega
→ El Sevilla anunció ayer la incorporación de Ivan Rakitic, centrocampista que fue un líder en el Sánchez Pizjuán y que regresa seis años después de su marcha, cuando levantó la Europa League de 2014 en Turín tras ganar una final por penaltis ante el Benfica.
Rakitic regresa para dotar al equipo de Julen Lopetegui de más poso de experiencia y calidad en el centro del campo y también para ejercer de líder de un vestuario que lleva varias temporadas renovándose con 14 ó 15 fichajes por año y que necesita un referente que acompañe en esta faceta a un Jesús Navas cuya personalidad le hace ser un líder diferente, más callado y hablador sólo en el campo.
La salida de Banega, que iniciará una aventura en el fútbol árabe, deja también un vacío importante en la faceta de asumir personalidad que debe ocupar Rakitic, un jugador muy querido por la afición sevillista que tendrá que asumir un rol de líder tanto fuera como dentro del campo.
No en vano, el croata se convertirá con el acuerdo alcanzado en el jugador mejor pagado de la plantilla, heredando prácticamente el contrato del argentino, aunque con matices que tendrán que ver con los objetivos logrados.
El barcelonista firmará por cuatro temporadas, hasta 2024, y el acuerdo alcanzado con el Barcelona hará que la entidad blaugrana perciba cantidades en función de los objetivos que el Sevilla logre en el tiempo de contrato del jugador, es decir, si hay clasificación para la Champions el coste será mayor que si el Sevilla juega sólo la Europa League ●
El equipo andaluz necesitaba recuperar a un referente en el vestuario