REVOLCÓN FINAL
Histórica exhibición de Tadej Pogacar en la contrarreloj, arrebatando el Tour a Primoz Roglic Porte bajó del podio a López y finalmente es 3º, por delante de Landa (4º) y Mas (5). Hoy, final en París
→ Parecía imposible, pero para Tadej Pogacar no hay nada inalcanzable. El joven esloveno de 21 años tenía que recuperar 57 segundos a su compatriota Primoz Roglic, quien después de lucir el maillot de líder doce jornadas tuvo que rendirse ante la gran sensación del Tour y del ciclismo actual. Tras una contrarreloj apasionante, de 36,2 kilómetros, con los primeros 30 kilómetros llanos y los últimos seis de dura ascensión hasta la Planche des Belles Filles, con una pendiente media del 8,5% y rampas del 20%, Roglic, líder del Jumbo-visma, equipo que ha dominado con mano de hierro la carrera, se dejaba 1’56” con su compatriota. Una barbaridad para un ciclista que de sus 41 victorias diez las ha logrado en la crono, y cuatro en las tres grandes vueltas ciclistas.
No fue el único revolcón del día. ‘Supermán’ López tuvo un rendimiento muy inferior al de sus rivales. Cayó hasta la sexta plaza y Richie Porte acabará 3º a sus 35 años. Justo premio para un corredor al que la suerte le ha sido esquiva muchas veces. Mikel Landa y Enric Mas finalizan 4º y 5º. De esta forma, el alavés iguala su mejor resultado final en el Tour (2017) y el balear su segundo gran resultado en una gran vuelta, tras ser 2º en la Vuelta de 2018. Y, por si la demostración de Pogacar no fue suficientemente insultante en la crono, llegará a París con el maillot blanco al mejor joven y el de lunares como el rey de la montaña, después que Carapaz lo perdiera ayer. La única mala noticia para el ciclismo español fue que Alejandro Valverde perdía la décima posición que ostentaba antes de la crono, aunque su labor ha sido clave en el buen rendimiento de Enric Mas.
Tras empezar en Lure, cuatro eran las tomas de tiempo que servían de referencia para saber el registro de los corredores: Le Raddon (km 14), Plancher-les-mines (km 27), un tercer punto a mitad de la subida final y la última toma de tiempos en meta, en la Planche des Belles Filles. Tras los dos primeros buenos registros de Cavagna y Dumoulin, empezó la exhibición de Pogacar, que ya en el primer parcial le ganaba 13 segundos a Roglic, por 36 en la segunda referencia. Se mascaba la tragedia, que se consumaría en la tercera toma de tiempos, cuando Pogacar se hacía con el mejor registro (49’15”) por delante de Dumoulin (a 48”) y Roglic a 1’22”. Los movimientos encima de la bicicleta, la forma de pedalear, evidenciaban la diferencia. Desde este punto hasta meta, Tadej se dio un baño de masas, ante un Roglic que llegó desencajado y a 1’56” del mejor tiempo de un Pogacar que hacía historia. Doblete en el penúltimo acto de un Tour en el que ha ganado tres etapas, como en la Vuelta 2019 que conquistó Roglic, en la que fue 3º, convirtiéndose en el segundo ciclista más joven en ganar con 21 años, por los 19,9 de Henri Cornet en 1904.
“Bravo, bravo” le decían a Pogacar. Poco después llegaba hasta su altura un desolado Roglic, que en la derrota demostró ser un señor, fundiéndose en un efusivo abrazo con su joven compatriota, a quien hoy le esperan 122 kilómetros de paseo triunfal hasta París. Después, una vez mañana celebre su 22 cumpleaños, a pensar ya en el Mundial ●