Un año del despido de Valverde
La derrota ante el Atleti en la Supercopa precipitó su salida del Barça
→ El 13 de enero de 2020, justo hoy hace un año, el Barça anunciaba el despido de Ernesto Valverde como técnico del Barça. Había llegado como líder de la Liga a Arabia Saudí, que acogió la primera edición con formato de semifinales, pero la derrota ante el Atlético, en una semifinal marcada por el VAR, precipitó su destitución a los cuatro días de aquel partido y la llegada de Quique Setién.
El día después de la derrota, el Barça viajó a Qatar para reunirse con Xavi Hernández, mientras Valverde y la plantilla volaban de regreso desde Arabia Saudí. El club argumentó que el encuentro estaba fijado desde hacía unos días, pero la presencia de Eric Abidal, secretario técnico entonces, y Òscar Grau, director general, dieron un realce a la cumbre de Doha. Se habló de cara a la próxima temporada pero el paso de las horas se empezó hablar de una decisión inmediata, a pesar de que la versión oficial del club decía que el desplazamiento fue para visitar a Ousmane Dembélé, que se recuperaba entonces allí de una lesión. Los resultados del equipo y las sensaciones que transmitía, con una fragilidad defensiva alarmante y una evidente incapacidad para mantener los resultados favorables, hicieron que la la continuidad de Valverde fuera insostenible. El ‘Txingurri’ puso el punto final con cuatro títulos (dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa de España) de nueve posibles. El que fuera segundo de Valverde, Jon Aspiazu, dijo en la SER “no fue el momento más oportuno, estábamos primeros y habíamos pasado en la Champions sin perder en el grupo, pero el club decidió dar un volantazo y nos tuvimos que marchar”. Y añadió sobre las críticas que recibieron. “Me parto de risa cuando dicen que no entrenábamos”.
Llegó Quique Setién pero el equipo arrastró una irregularidad hasta el confinamiento. Al regreso, la decadencia del Barça fue progresiva perdiendo la Liga de mala manera hasta el doloroso 2-8 en la Champions de Lisboa. El derrumbe fue total y días después de aquel 14 de agosto, el Barça señaló a Ronald Koeman para reconstruir un equipo y un vestuario que irreconocible. El técnico holandés tomó medidas drásticas y se puso a levantar al equipo. Hasta hoy ●
Aspiazu: “No era el momento. Me río cuando dicen que no entrenábamos”