ATROPELLADOS POR MBAPPÉ
→ El crack francés lideró con un ‘hat trick’ el triunfo del PSG, que liquidó al Barça ya en la ida → Messi hizo el 1-0 de penalti, pero los parisinos fueron muy superiores tras el descanso
→ El Barça volvió a bajar a la tierra. Con siete supervivientes del once inicial del 2-8 del verano ante el Bayern, esta vez se quedará en octavos de final. Kylian Mbappé arrasó el Camp Nou y dejó la eliminatoria de Champions sentenciada. Porque, vamos a ver, un milagro en el Parc des Princes... como que no. El Barça se irá de la Champions por la puerta de atrás por primera vez desde 2007. Creciente con el paso de los minutos, Mbappé fue un ciclón en su estreno en el estadio del FC Barcelona y fue el encargado de plasmar en el marcador la mayor consistencia del PSG, que pese a algunas muestras de debilidad defensiva fue muy superior al Barça, que al final bastante hizo con evitar más goles. Messi avanzó a los azulgranas de penalti, pero Mbappé empató rápidamente y, ya en el segundo tiempo, marcó su segundo gol, que acabó de hacer hincar la rodilla al Barça antes de que Kean lograse el tercero de cabeza y el crack francés completase su ‘hat trick’.
El Barça resistió algo más de medio partido. Compitió bien al inicio, se puso por delante y tuvo sus opciones, pero se descompuso en la segunda parte en cuanto Mbappé, con la asistencia inestimable de un Verratti majestuoso, pisó el acelerador y entró con toda su potencia en una defensa de circunstancias, con un Dest recién recuperado siendo su marcador más inmediato, ayudado por un Piqué que forzó su reaparición.
En el partido más grande en lo que va de temporada, Koeman no reservó nada. No puede negársele que fue audaz. La duda de la previa se resolvió con la alineación de Piqué, que avanzó mes y medio a los pronósticos de recuperación de su lesión de ligamentos. Bravo por el esfuerzo de Gerard. La cuestión es si su sacrificio mejoró mucho las cosas. O, dicho de otra manera, si habrían sido mucho peor sin él. Estaba cantado que el PSG iba a intentar explotar la espalda del gran central y, antes de cumplirse el primer minuto de juego, Verratti, desde su posición de media punta, ya había explorado esa zona con un pase a Mbappé, con salida defectuosa de Ter Stegen.
A pesar de que pronto Icardi avisó con un disparo, lo cierto es que el Barça cerró bien al inicio su retaguardia, bajando si era necesario las líneas de presión para evitar que los parisinos explotasen los espacios, aun a costa de perder mordiente arriba. Así, la primera fase de partido fue de mucho tanteo, con gran respeto entre ambos equipos y ataques posicionales. Tras una primera llegada de Griezmann a pase vertical de Pedri que Keylor tapó bien, el joven canario evitó el 0-1, en un remate flojito que le salió mal a Icardi a pase de Verratti al área.
La oportunidad
El Barça tuvo la ocasión de cambiar el partido, puesto que fue el que le cambió el ritmo. Una internada de De Jong tras gran pase de Messi acabó en penalti. Kurzawa, que en 2017 ya se hizo un autogol en la gran remontada del Barça, zancadilleó al holandés por detrás, un penalti del que la comprobación del VAR no arrojó dudas. Tampoco las arrojó la ejecución de Messi.
La alegría fue efímera. Dembéle perdonó el 2-0 tras una recuperación de Leo en uno de los muchos líos defensivos del PSG y, casi a continuación, Mbappé cazó en el área un gran pase de Verratti tras internada de Kurzawa, superó a Piqué y Lenglet y batió sin contemplaciones a Ter Stegen, quien poco después sacaba una mano tremenda para evitar el 1-2 a chut de Icardi.
Mbappé arrasa
También pudo marcar Griezmann tras pase de Pedri, pero cruzó demasiado el balón y al descanso se llegó con 1-1. El regreso puso en escena un PSG más fresco, que subió una marcha ,y Ter Stegen sacó otra mano providencial a chut de Kean tras otra llegada de Mbappé, que calentaba motores.
El holandés Kuipers no sólo perdonó varias veces la segunda amarilla a Gueye, sustituido por Herrera en cuanto Pochettino vio la que estaba liando, sino que se comió unas manos de Kean dentro del área. Y, casi a continuación de ese penalti no señalado, Mbappé puso el 1-2 tras un centro de Florenzi, que entró por la derecha cómodamente, después de otro gran pase de Verratti. Piqué llegó a rechazar, pero apareció Mbappé y resolvió.
Ter Stegen salvó otra vez el tercero, que llegó sin embargo poco después, en una falta lateral. Cabeceó Kean a gol un centro de Paredes. Mbappé completaba el ‘hat trick’ y la goleada en el tramo final en un ‘tres contra dos’ a pase de Draxler ●
2ª peor goleada El PSG rozó el 0-4 del Dinamo Kiev, mayor europaliza al Barça en el Estadi (liguilla de la Champions 1997-98)