SE AFERRAN A LA LIGA
El Barça, con doblete goleador de Messi, aseguró los tres puntos y se acerca al Atlético Tras un primer tiempo muy flojo, el conjunto azulgrana reaccionó en el segundo
El Barça tenía que ganar al Elche para mantener viva la ilusión, en el más amplio sentido del término, de Laliga. Y lo hizo, en un segundo tiempo pleno de efectividad, después de que en el primero se apareciesen todos los fantasmas del día del Cádiz, tres días atrás: juego bajo mínimos, ritmo cansino y pocas ocasiones. Como si molestase este partido de primera jornada de este campeonato surrealista jugado en febrero. Y con sustos del rival, en este caso un Elche en zona de descenso que hace poco cambió de entrenador. En el segundo acto el Barça subió las revoluciones y, con un muy buen ratio de aciertos, Messi se puso el traje de resolver. Lo hizo rápido: prácticamente en la primera acción marcó, a pase de Braithwaite. Repitió después tras jugadón y asistencia de De Jong y originó la jugada del tercer tanto, de Alba, en un partido que, desde luego, no pasará a la historia.
Koeman había pedido a las vacas sagradas que decidiesen. Messi pareció escucharle. Eso sí: no sin antes haber ofrecido, no Leo sino todo el equipo, un primer tiempo horroroso. Tras el descanso, el Barça se aferró a Laliga. No con un gran despliegue futbolístico, pero sí con una intensidad y un ritmo aceptables. Visto lo visto en el Camp Nou antes del descanso, cuesta creer que los tres puntos sirvan para aumentar en mucho la autoestima del conjunto azulgrana. Pero sí sirven para acercarse al Atlético.
Trincao, el único
Lo cierto es que el partido tuvo poca chicha. Y costó digerirlo, a pesar de que en los primeros minutos hubo dos buenos avisos del Barça, a través de Trincao, una de las novedades en un once con algunas rotaciones pensando en el decisivo compromiso de este sábado en Sevilla. El extremo portugués, con ganas y descaro, protagonizó dos acciones idóneas para que el Barça se hubiese puesto por delante. La primera, al culminar desde el área pequeña una buena acción, nada más iniciarse el choque, con un remate que el meta Edgar Badia rechazó. Y, veinte minutos después, volvió a internarse en el área, recibió un meritorio pase de Messi y, tras dos regates en los que se deshizo de sus defensores, su remate, en inmejorable posición, también fue rechazado por el meta ilicitano.
Ahí se detuvo el bagaje de ocasiones del Barça, aunque Badia volvió a lucirse en un cabezazo de De Jong tras falta lanzada por Messi. Aparte de estos fogonazos y de las ganas de Pedri entre líneas, el tostón de la primera parte fue de los que hacen época. Bueno, aparte de los avisos de rigor del Elche: uno en remate alto de Lucas Boyé desde la frontal del área pequeña a poco de iniciarse el partido y otro, llegando ya al descanso, en una transición conducida por Pere Milla, con chut final que rechazó Ter Stegen. Ni Boyé ni Milla aprovecharon las ocasiones del Elche, a diferencia de lo que hizo el Cádiz el pasado domingo: marcar en su único tiro entre palos.
Cambio táctico de Koeman
Pjanic había comenzado de doble pivote con De Jong. Duró medio partido, porque al descanso el bosnio fue el sacrificado por Koeman para buscar una reacción con la entrada de Dembélé y abrir bien el campo con el francés y Trincao en los extremos. Braithwaite, que en la primera parte se movió por la izquierda, pasó a jugar en punta, con Messi, ‘falso nueve’ en el primer tiempo, por detrás suyo y Pedri (exquisito entre líneas un día más) y De Jong en el doble pivote. Trincao se fue apagando tras un buen primer tiempo.
Al minuto de iniciarse la segunda parte, con este nuevo planteamiento y con un Barça que reapareció del vestuario con otro talante, con nuevas energías, Messi cambió el paisaje del partido en una jugada personal. Entrada en el área, combinación con Braithwaite y remate final a gol mientras caía, pese a la oposición del defensa Mojica.
El Barça necesitaba cerrar el partido y esta vez lo logró. Con la entrada de Busquets en el tramo final del partido, De Jong se sintió liberado para desplegar su potencia y fabricó el segundo de Messi. Cogió el balón en defensa, cruzó más de medio campo, hizo un slalom, entró en el área y cedió a Leo, que resolvió, con lo que el Barça ya respiró definitivamente.
El crack argentino volvió a ser protagonista en el tercer gol azulgrana. Centró sobre Braithwite, que de cabeza asistió a Alba, que llegando como una moto al área marcó. Doblete de goles de Messi y doblete de asistencias de Braithwaite. Con los cambios que introdujo Koeman en el tramo final, entró Griezmann para estrellar un balón en el travesaño y, poco después, driblar al meta y rematar fuera.
El galo no acaba con su gafe. Los azulgranas, en cambio, mantienen vivo el sueño de Laliga. Tal vez ilusionados, tal vez ilusos ●