Vinicius nunca caminó solo
El brasileño vivió su noche más especial como madridista y señaló el camino del Real
→ Por los goles y jugadas del repertorio que sacó a relucir, quien se llevó las portadas fue Vinicius. Y muchas de ellas fueron merecidas. Pero quien se quede atascado en una actuación estelar del brasileño para explicar la contundente victoria del Madrid sobre el Liverpool, caerá en el error. Lo hará, eso sí, como todo aquel que pensó antes del combate que los golpes iban a estar más repartidos. No fue así.
El Liverpool, antaño máquina perfecta de gran diseño alemán, mostró su versión más alejada de sí misma. Ni rastro de aquel equipo con motor Premier que llegaba a Madrid después de superar una importante crisis. Ni siquiera los más madridistas esperaban ver a su equipo tan superior. Y más aún con la lista de bajas que traía, a la que se le sumó a última hora el positivo por Covid-19 de Raphael Varane. Pero lo fue. Y con muchos argumentos.
Vini necesitaba una noche así
El primero en avisar de todo esto fue Vinicius. El brasileño, empapado muchas veces por las críticas, nunca caminó solo, aunque a veces lo pareció. Siempre encontró en él mismo a su escudo más firme contra las dudas y ayer se deshizo de un plumazo de todas ellas. Necesitaba una noche como esta y aprovechó que por la banda izquierda de los ‘red’, curiosamente, los semáforos estaban en verde para anunciar a todo el mundo que está llegando, porque asegurar que ya lo ha hecho viendo a Haaland o Mbappé hacer según qué cosas quizás sea asegurar demasiado.al brasileño le siguió la versión más precisa de Kroos, porque sí, todavía puede serlo aún más, y un conjunto de futbolistas que no echaron de menos el carácter de Sergio Ramos, presente en la grada y tentado de saltar en cualquier momento.
Klopp, arrepentido
Y a los mandos, Zidane, que de nuevo volvió a estar a la altura ganando la batalla a Jürgen Klopp. De hecho el alemán tuvo que desdecirse de su planteamiento inicial y quitar del campo a Keita para poner a Thiago a dirigir. Surtió efecto, pero efervescente pues el Real Madrid de nuevo volvió a recuperar los mandos. Los de blanco demostraron una vez más que en las noches grandes se crecen, que son adictos al vértigo de la Champions y que ya sueñan con la Decimocuarta porque en el conjunto blanco la imaginación siempre va un paso por delante de la realidad. Quizás venga de ahí el empeño de Florentino Pérez en diseñar la Su- perliga Europea, para que los suyos estén siempre obligados a demostrar que son mejores que el resto de sus iguales.
El Liverpool, antaño máquina perfecta de diseño alemán, fue muy inferior al Real
En Anfield, los ingleses tendrán la última palabra aunque sin público
Hay eliminatoria
A todo esto, no hay que olvidar que a esta película le queda una se- gunda parte. Noventa minutos más con posibilidad de créditos y escenas inéditas en una prórroga de infarto.
El escenario, Anfield, que aun- que más silencioso de lo todos qui- siéramos, sigue siendo Anfield. Por tanto, hay eliminatoria por- que la Champions, afortunada- mente, siempre será la Cham- pions. Y eso ninguna figura del tablero podrá cambiarlo ●