El mejor homenaje a Mussons lo hizo Koeman en Sevilla

En el día que murió Josep Mussons, Koeman alineó hasta 8 jugadores surgidos de la cantera, 5 en el equipo titular y 3 suplentes. Más de la mitad del equipo para exhibirse ante el Athletic. El directivo que más veces ha presidido partidos del Barça B en el Miniestadi, murió la víspera de la final. Él llevaba años disfrutando de Messi, Piqué, Busquets y Alba. Pero Koeman alineó también a

Mingueza –que hizo su mejor partido-, e hizo entrar a Sergi Roberto, Ilaix y Araujo, el único que no pasó por el fútbol base pero que también subió del filial. Cuando a finales de los setenta, Núñez cambió el rumbo del Club y encargó a Jaume Olivé, Jaume Amat y

Oriol Tort que convirtieran la Masia en una residencia para formar jugadores. Desde su inauguración, el 20 de octubre de 1979 y durante los 20 primeros años, el vicepresidente Mussons fue una figura fundamental, volcándose en la iniciativa.

Hay cosas y casos que el vicepresidente contaba con simpatía. Un ejemplo. Mussons, el hombre del imperio Bimbo, se presentaba por sorpresa en la Masia para certificar que lo que Avelino cocinaba para los chicos seguía al pie de la letra las pautas de nutrición marcada para los jóvenes deportistas.

Jamás encontró un desliz. Sólo, en el día del cumpleaños de cada jugador, el chico tenía el derecho a pedir su menú preferido. Eran otros tiempos ●