La falta de gol condena al Getafe en Balaídos
→ Nolito acertó en la única acción de peligro del Celta
→ El Celta sumó su cuarta victoria consecutiva tras imponerse por la mínima al Getafe en Balaídos. El triunfo deja unas mínimas esperanzas europeas para el conjunto del ‘Chacho’ Coudet, mientras que la derrota mantiene a la escuadra de José Bordalás cerca del precipicio. Y es que el equipo madrileño sigue pagando su falta de gol; no en vano es el menos realizador de la categoría con solo 26 tantos marcados en 36 jornadas.
La primera parte demostró lo importante que es estar en buena dinámica. El Celta, pese a tener en su poder el balón, ofreció su versión más austera. El Getafe, por contra, estuvo más metido, incomodando con su presión al rival. Pero llegó el chispazo vigués. En el minuto 24, un centro desde la derecha de Kevin Vázquez al corazón del área lo peinó hacia atrás Santi Mina, quedando el balón a pies de Nolito, que superó a David Soria.
No merecía el Celta ir por delante. El Getafe se reanimó y solo la ‘campana’ del descanso salvó al once celeste de perder su renta en el marcador. Los visitantes se lanzaron al ataque y en dos minutos, del 43 al 45, dispusieron de tres ocasiones para empatar. Un chut de Ángel desde la frontal del área tuvo una gran respuesta de Iván Villar. Acto seguido, Enes Ünal, de cabeza, envió el balón fuera para posteriormente Olivera mandarlo por encima del travesaño.
Tras el paso por los vestuarios, el Getafe siguió tan intenso como falto de pegada, pues solo un remate de chilena de Ángel que fue detenido por Iván Villar fue su única aproximación peligrosa. Otra ocasión tuvo el central Chema con un chut lejano que volvió a encontrarse un paradón de Iván Villar.
Coudet no lo veía claro y en el minuto 82 quitó a un delantero (Santi Mina) para meter a un lateral (Hugo Mallo). El Getafe acabó embotellando al Celta en su parcela, pero sin la pólvora necesaria se fue de vacío de Balaídos ●