CLUB PRIVADO
→ La Euroliga trabaja con el objetivo de cerrar por completo su competición para la temporada 2023-24 → Falta concretar si se mantendrá el número actual de 18 equipos o se aumentarán los participantes
→ La Euroliga está dando los primeros pasos para cerrar por completo su competición a partir de la temporada 2023-2024. La idea es que todos los equipos que empiecen esa campaña tengan ya una plaza indefinida y que no exista ninguna vía de acceso al torneo, ni siquiera desde la Eurocup. Se trataría de una competición privada al estilo NBA, en la que solo podría entrar un club nuevo por invitación y para sustituir a uno de los existentes en el caso de que este atravesara problemas económicos que aconsejaran su relevo.
Este proyecto supone un enfrentamiento frontal con la FIBA y las ligas nacionales, que defienden la meritocracia deportiva como elemento fundamental de la identidad del deporte europeo. Las ligas y sus equipos sin licencia, además, han podido comprobar en las últimas dos décadas como el cierre progresivo de la Euroliga las ha estrangulado económicamente al restarles atractivo y, en consecuencia, patrocinadores y demás vías de financiación.
Está por ver cuál es la reacción política a este paso de la Euroliga en las altas instancias de la Unión Europea y sus estados, que en general ya se mostraron muy críticos en las últimas semanas con el -de momento frustrado- proyecto de la Superliga de fútbol.
Los 11 clubs que a día de hoy son propietarios de la Euroliga y tienen plaza fija en la misma (Real Madrid, Barça, Baskonia, Anadolu Efes, Fenerbahçe, Olympiacos, Panathinaikos, CSKA Moscú, Maccabi Tel Aviv, Zalgiris y Armani Milan) no solo están al tanto de este proyecto sino que son sus principales impulsores. A esta lista se deben unir en breve el Bayern Munich y el ASVEL Villeurbanne, a los que la Euroliga ha trasladado ya el pliego de condiciones para concretar su obtención de una licencia permanente.
Aparte de estos 13 clubs, completarán la nómina de 18 participantes en la próxima Euroliga 2021-2022 el Mónaco y el Unics Kazan, campeón y subcampeón de la Eurocup, el Alba Berlín, que ha recibido una invitación de dos años, el campeón de la Liga Adriática de esta temporada (la final la van a jugar el Estrella Roja y el Budusnocst) y un último equipo por invitación, que al parecer será el Zenit de San Petersburgo.
La Euroliga, creada en el año 2000, ha ido abandonando progresivamente desde entonces los criterios deportivos de acceso a su competición. En un primer momento todas las grandes ligas nacionales europeas clasificaban a sus mejores equipos, fuera de la temporada anterior o del cómputo de varias temporadas anteriores (los famosos trienios en la ACB). Poco a poco la competición se fue cerrando y, tras firmar un contrato con la compañía IMG en noviembre de 2015, los 11 equipos propietarios antes nombrados recibieron una licencia de diez años durante los cuales su participación en la competición estaba garantizada. El resto de plazas (cinco entre 2016-17 y 2018-19 y siete a partir de 2019-20) fueron adjudicadas en función de los resultados de la Eurocup y de alguna liga (España, Adriática, VTB, Alemania) o por invitación.
En esta última temporada solo Alba Berlín (Alemania), Estrella Roja (Liga Adriática), Khimki (Liga VTB) y Valencia (Eurocup) han participado por sus méritos deportivos del año anterior, con las 14 plazas restantes yendo a los 11 equipos propietarios, a 2 equipos con licencia bianual (Bayern y ASVEL) y a un invitado (Zenit). A partir de 2023-24 se eliminarán estos últimos vestigios de clasificación por resultados deportivos ●