Hoy, Camp Nou a reventar
Gerard Piqué no merece salir del Barcelona de la manera que va a salir. Es uno de los defensas más grandes de la historia y ha dado mucho a este club. Su salida parece un poco forzada, como si le hubiesen empujado. Creo que lo han provocado, como ya ocurrió con el pequeño.
Piqué, al que conocí como cadete, entrenado por Tito Vilanova, estando yo en el fútbol base con Quimet Rifé, puede sentirse orgulloso de todo lo que ha hecho y lo que ha ganado en el Barcelona. Ha estado a un gran nivel en toda su carrera. Últimamente tenía la cara triste, porque no estaba dando todo lo que podía, pero se va uno de los más grandes de la historia.
Las cosas han ido mal en el entorno, pero no por él. Quizás se equivocó en creerse imprescindible, cuando nadie lo es. A todos nos llega la hora y creo que los grandes suelen tener problemas a la hora de la salida en este club. No fue mi caso. Con Núñez nunca tuve problemas de contratos o con mi homenaje. Siempre fue de cara y siempre cumplió su palabra.
Lo que espero ahora es que la afición responda: en el Barçaalmería quiero un Camp Nou repleto. Una afición que despida como merece a una leyenda, un futbolista inteligente, con imaginación y clase y muy barcelonista, como toda la familia. Tengo una gran relación personal con su abuelo, Amador Bernabeu, persona extraordinaria, directivo eficiente y ejemplar y barcelonista hasta la médula. Él es el responsable de haber transmitido el amor por el club a Gerard y a toda la familia. Ahora está triste y no se ve para jugar, pero ha sido un grande. Gracias, Gerard ●