Adiós a Fusté, símbolo de los 60
→ Titular en la final de la Eurocopa-1964, marcó una época en el Barça (1962 -72) y conquistó cinco títulos haciendo gala de su clase en la media
→ El barcelonismo está de luto. Josep Maria Fusté Blanch, fino centrocampista del FC Barcelona entre 1962 y 1972 y presidente de la Agrupación de Jugadores entre 1976 y 1989, falleció ayer en Barcelona a la edad de 82 años. El velatorio tendrá lugar mañana en el Tanatori Les Corts de 15 a 21 h. y el sepelio, el domingo a las 12 h. en el mismo lugar. Más popularmente conocido como el ‘noi de Linyola’ al haber nacido en la citada localidad ilerdense el 15 de abril de 1941, dejó huella en el Barça con su calidad como interior y su gran llegada conquistando tres Copas del Generalísimo (1962-63, 1967-68 y 197071), una Copa de Ferias (1965-66) y una Supercopa de Ferias (1971) además de formar parte de la selección española que ganó la Eurocopa en 1964 siendo titular en la final del Santiago Bernabéu ganada a la URSS (2-1). Fue ocho veces internacional. Estuvo también en el Mundial de Inglaterra-66, donde metió un tanto en la derrota de la primera fase (2-1) ante la RFA en Villa Park y fue campeón del Mundial militar
Debutó con HH a los 17 años pero fue cedido a Osasuna mientras hacía la ‘mili’
en 1965 y tercero en 1966.
Tras llegar al club azulgrana a los 12 años y subir hasta el Condal, Fusté llegó al primer equipo del Barça procedente de Osasuna, donde estuvo cedido una temporada (1961-62) al estar haciendo el servicio militar en Pamplona. Como jugador del Barça, debutó oficialmente en la vuelta de la final de la Copa de Ferias (10 de junio de 1962) en casa ante el Valencia (1-1) tras el 6-2 de la ida aunque ya lo había hecho con dos goles en un amistoso del tradicional encuentro de Navidad en 1959 contra el Stade Français de París cuando sólo tenía 17 años tras ser citado por Helenio Herrera. Disputó 277 partidos oficiales con la camiseta azulgrana y marcó 71 goles. Fueron años duros, sin una Liga culé con el Madrid ganando siete de diez mientras jugó en el Barça. Tras dejar el Camp Nou con un homenaje el 30 de agosto de 1972, militó dos campañas en el Hércules (1972-74), donde colgó las botas.
Tras su retirada mantuvo su estrecha vinculación con el club, especialmente con los Veteranos. En sus 13 años de presidente, los ex jugadores del Barça empezaron a jugar por toda Catalunya, por España y por vez primera en Europa. Le
Presidió la Agrupació de Veteranos (76-89) y luego siguió muy vinculado
fue concedida la Cruz de la Orden Civil de Beneficencia, regularizó las ayudas a los ex jugadores más necesitados con aportaciones económicas y cuidados médicos y ayudó a buscar trabajo a quienes no lo tenían.
En los Veteranos siguió jugando como capitán y fue gran mano derecha de Ladislao Kubala (1990-99), Martí Vergés (1999-2003) y Ramon Alfonseda (2003-2023), que le sucedieron como presidentes de la Agrupació, que dejó en 1989 para ser precandidato a las elecciones presidenciales del club. Durante los mandatos de Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu al frente del FC Barcelona, fue asesor deportivo junto a Carles Rexach y Migueli así como un fijo en los palcos del Camp Nou, el Mini y el Johan Cruyff. Después de la maldita pandemia, Fusté ya no pudo dedicar las horas que deseaba a la Agrupació y al club de su vida. Joan Laporta expresó su pésame en Twitter definiendo a Fusté como “un hombre de club, figura legendaria del Barça y alma de la Agrupació de Jugadors del FCB durante muchos años. Descanse en paz” ●