Aitana, referente a todo ‘gas’
Inconformista y perfeccionista, no come carne y sufre cada vez que sube a un avión
→ Es mundialmente conocida y sigue siendo la misma, la de siempre. Mismo pueblo, mismos amigos, mism apersonalidad. de carácter fuerte y sin pelos en la lengua, es un volcán emocional. Si entra en erupción, se abre paso y sorteando todos los obstáculos. Quiere ser referente para las y los que vengan detrás y a los dos años ya se convirtió en uno sin saberlo. Fue de las primeras niñas en España en adoptar el apellido maternal. Así, Aitana Bonmatí abrazó y cultivó la autenticidad y diferencia desde la cuna.
Igualdad, esfuerzo, solidaridad, inclusión y reivindicación son los valores que le inculcaron en casa. Ultradiscreta en lo personal, es un tanto mandona de manual. Le gusta tener las cosas controladas. Si pierde la capacidad de acción, padece. Le pasa cada vez que sube a un avión. Los teme y odia por igual. También a los insectos, por los que siente verdadera fobia. No es supersticiosa, aunque siempre “toca madera” al hablar de temas delicados como las lesiones. No come carne, esf le xit aria na. y tampoco come en platos y cubiertos de apartahoteles o pisos turísticos. O se lleva los suyos o se compra unos.
Todos la llaman Aitana .Supadre, Puni (por la canción infantil catalana “La gallina Poniquera” que le cantaba de niña y que le sigue arrancando sonrisas). Polifacética, exprime las 24 horas del día. Estudiar Gestión Deportiva, escribir un libro, participar en un documental, involucrarse activamente en iniciativas sociales, colaborar con ACNUR u otras causas solidarias, son algunas de las tareas que la deRib es añade diariamente a su ya comprometida agenda de futbolista profesional. yes que, si quiere algo va a por ello, sea lo quesea, cueste lo que cueste. Como caminar quilómetros para encontrar un té macha con leche de avena, una de sus perdiciones junto a la tarta de limón de Cal Forner Vell.
Actualmente, su palabra es “gas” y lo abre a fondo. Lee bastante, sobre todo temática histórica y de la II Guerra Mundial. Le cogió el gustillo a la lectura tras años escuchando los cuentos que su padre inventaba para ella antes de acostarse.
Escucha música catalana. Sopa de Cabra es uno de sus clásicos y ‘Coti per Coti’ de The Tyets es la primera canción que pone al subirse al coche.
Curiosa y amante de los rompecabezas desde bebé, iba siempre contenta a la escuela. Inquieta, ambiciosa, impaciente e inconformista. Su exigencia y perfeccionismo le dan alas para superar retos a la vez que la encierran en la jaula de la insatisfacción perenne que causa la desconexión del momento presente. Lo está trabajando.
Perfecta ilustración de que en el tarro pequeño está la buena confitura (mide 1’62 y pesa 51kg), sueña con hacer del mundo un lugar mejor. Sin injusticias, sin dicotomías, sin ese “yo más” tan egoísta y tan de nuestros días. un mundo más de verdad, más de todos y para todos. Y yo, si me los permitís, me uno a ese sueño ●