La salvación se aleja para el Espanyol
→ Cayó en Sevilla pese a haberse ido al descanso con ventaja, pero los locales remontaron con un absurdo penalti de ‘Vini’ y un tanto de Gueye
→ La permanencia se complica para un Espanyol que desaprovecha cartuchos. El equipo de Luis García perdió ayer ante el Sevilla y da un durísimo paso atrás en su agónica carrera por la salvación, un revés tras el celebrado triunfo ante el Getafe. Los catalanes estaban obligados a puntuar como mínimo, pues sus directos rivales lo habían hecho, pero se fue de vacío del Nervión y se complica sobremanera sus opciones de seguir vivo. Máxime porque ahora llega el parón liguero y el día 14 vuelve con un derbi en el RCDE Stadium.
Tras el nuevo KO se mantiene penúltimo en la clasificación, a tres puntos de la salvación. Mientras que el Sevilla se rearma tras pinchar ante el Girona y se estabiliza en la zona media, cogiendo energía para la cita de la Europa League del próximo jueves.
El Espanyol se fue al descanso con ventaja gracias a un golazo de Puado, pero vio como el Sevilla le dio la vuelta al marcador y se acabó imponiendo por 3-2 gracias a un penalti absurdo de ‘Vini’ que transformó Ocampos y un postrero tanto de Gueye.
A los primeros 45 minutos del partido en el Pizjuán no le faltó de nada. Hubo intensidad, nervios, polémicas arbitrales y golazos. Luis García volvió a apostar por un once ofensivo, muy valiente con una medular sin mediocentros defensivos, como hizo ante el Getafe. En el Sevilla destacó la titularidad de Rafa Mir.
Pronto empezó el ‘baile’. Ya en el minuto 4, Puado estuvo a punto de cazar un gran centro de Melamed, llevando el susto a la grada del Pizjuán. Pero un minuto después respondió Oliver Torres con un disparo a bocajarro ante el que se lució Pacheco. Eléctrico inicio.
El Sevilla tocaba con más criterio ante un Espanyol aculado, pisando poco el área rival. Avisó Rafa Mir (16’) y ya no perdonó Bryan Gil con un gol muy polémico. Subió al marcador el 1-0 a instancias del VAR aunque pudo haber una falta previa de Mir sobre Oliván que el colegiado ignoró. El Espanyol, picado en su amor propio, se estiró y empezó a llegar con veneno. Así en el 29, nuevo lance polémico pero en el área andaluza.
El Espanyol empató con un gol en propia puerta de Rekik, que primero se anuló por un supuesto fuera de juego de Joselu, pero que el VAR rectificó pues el pichichi perico no había intervenido en la jugada. Volvían las tablas, el 1-1, en un gran duelo. Con la igualada el Espanyol se vino arriba y regaló sus mejores minutos. Puado la tuvo (36’) pero para clarísima la que marró Joselu en el 41’, lanzando fuera ante el meta local. Increíble.
Faltaba lo mejor antes del descanso. Puado se inventó un golazo, una rosca brutal que heló el Pizjuán, antes de irse a la ducha para poner en ventaja al Espanyol.
Tras el descanso, Joselu primero y luego Ocampos pudieron ‘mojar’, viéndose un duelo equilibrado. Pero en el 60’ se dio un cambio que resultó determinante para el Espanyol. Darder, tocado por un pisotón en el pie que había recibido en la primera parte, dejó el verde y salió Vini Souza, más músculo en la medular. Pero ocho minutos después el joven brasileño realizó un penalti totalmente evitable. Pisó a Gueye en el área y lo derribó, pena máxima de libro, que transformó Ocampos (2-2).
Con la igualada el Sevilla se vino arriba y ambos entrenadores movieron el banquillo pues la intensidad empezó a pasar factura.
El Sevilla empezó a morder con más argumentos, haciéndose con el balón, coincidiendo con la ausencia de jugadores creativos en la medular perica. En-nesyri avisó y sobre todo, Ocampos con un disparo al larguero (86’). El Espanyol aguantaba como gato panza arriba pero el tercer gol local planeaba. Y en el 88’ cayó. Un buen centro de Acuña fue rematado de primeras por Gueye. El gol también levantó polvareda pues los de Luis García reclamaron una falta de Torres sobre Edu Expósito en el inicio de la jugada. Nada, el gol subió al marcador ante la desesperación de un Espanyol que se hunde en el pozo y ve su futuro negro ●