“El debut de Johan y el primer gol de ronnie”
→ Mi primer recuerdo en el Camp Nou es en un banco de color verde en Lateral primera gradería con mi abuelo y mi padre. Ya cuando pude tener abono con 11 años, en 1974 me hice socio y pasé a Gol Nord segunda gradería y con 15 años, en 1978, pudimos juntarnos en dos o tres filas cercanas unos 14 de familia entre padres, tíos, hermanos y primos en Tribuna primera gradería cerca de
Gol Sud. Mis hijos, de 25 y
22, siguen en lista de espera, donde los apunté en
2003. Nunca olvidaré el debut de Cruyff ante el
Granada. Pasamos del blanco y negro a los colores ‘ye-yé’ al llegar con
Danny, como después
Schuster y Gaby, y el Barça se transformó en un club moderno con Johan.
Salté con su golazo al Atlético a centro de Rexach frente a mí. Como Sotil, me encantaba ‘Charly’.
Era mi favorito, yo jugaba con el ‘7’. Vibré con las remontadas ante el Feyenoord, Ipswich y Anderlecht
con el gol de Zuviría. Y me identifiqué con Krankl y ‘Simonet’, con aquel tanto para ganar la Recopa-82. Fueron extranjeros ejemplos de identificación con el club como Stoichkov. Me impactó cómo la afición aplaudió a Cunningham, del
Madrid, y una década después me marcó el Dream Team. Qué noche la de Bakero y Hristo contra el Benfica y para emoción tremenda, las dos Ligas de Tenerife. La de Djukic me pilló en la boda de Jordi Moix con Sandro, Mestre, Bladé y Vilanova.
Jordi paró la fiesta y después hizo de Djukic tirando un penalti con sillas formando la portería con su esposa, Carlota, parándolo como González. Delante vi también la cola de vaca de Romario y la chilena de Rivaldo. Aluciné pero quizá más con el primer gol de Ronaldinho al Sevilla aquella madrugada. Estaba en el palco ya como directivo y representó un renacer de donde veníamos. Nos escogió a nosotros gracias a Sandro y fue el inicio de una era dorada que siguió después con Messi como líder. Su golazo al Getafe, el de la final de Copa de 2015 al Athletic... Ese ambiente fue también inolvidable con la locura máxima en el 6-1 al PSG. Nasser Al-khelaïfi se despidió con 3-1 para felicitar a los suyos en el vestuario pero cayeron tres en cinco minutos. Fue un gesto feo y Kluivert le siguió sin estar de acuerdo. ¡Son tantísimas noches en nuestra casa! El Camp Nou,nuestravida ●