Renovación necesaria
El Real Madrid va a cerrar la temporada 22/23 con algunas luces y muchas sombras. Luminosa ha sido su temporada de Champions hasta que se estrelló con el City en el Etihad. Estaba a un solo partido de la final, había empatado en el Bernabéu, pero en Manchester el Madrid no compareció, una anomalía si observamos su comportamiento habitual en Europa, y el resultado fue demoledor. Un partido que obliga a la reflexión. Sobre todo, si lo unimos a su comportamiento general en la liga. El Barça se proclamó campeón a 14 puntos del Madrid. Claro que el equipo de Xavi ha hecho una liga con unos números magníficos, tan claro como que su rival ha perdido los dos partidos con el Villarreal, no le ha ganado al Girona, ni hecho un solo gol a la Real, y ha perdido con el
Rayo y el Mallorca, entre otros.
En el haber blanco están la Supercopa de Europa y el Mundialito, títulos que no se ganan si no eres campeón de Europa, y, por supuesto, la Copa, un torneo que se le resiste al Madrid. Frente a Osasuna sumó su título número 20, hacía 9 años que no lo ganaba, y aún así está a 11 del Barça. Puede que no sea su título preferente, está claro que además le cuesta ganarlo.
Con todo, el balance general de la temporada madridista exige una toma de conciencia sobre el diseño de su plantilla. Modric y Kroos merecen la renovación, pero ya no está claro si han de ser los pilares que todo lo sustenten.
Merecen respeto y una salida, cuando sea, todo lo digna posible. Sucede algo similar con Benzema. Jugadores que han marcado una época que en Manchester dio su toque final. Toca renovar ●