Al rojo vivo
26 segundos separan al líder Thomas de Roglic en la cronoescalada decisiva de hoy
→ Tres segundos que pueden valer un Giro de Italia, o no. Después de la 19ªetapadelacarrera,laconsiderada etapareinadeestaedicióndelacorsa Rosa, sólo 26 segundos separan a la ‘maglia rosa’, el galés Geraint Thomas, y al esloveno Primoz Roglic, segundo clasificado. Había muchas esperanzas depositadas ayer en el exigente reto que esperaba a los supervivientes de la carrera –sólo quedan 125 ciclistas en carrera– en la etapa más dura de todas, en un día con cinco puertos de montaña, con más de 5.400 metros de desnivel y con la Cima Coppi, el techo del Giro, en la subidafinalalastrescimasdelavaredo (2.304 metros). Pero la igualdad existente entre los mejores, lo justas que están las fuerzas ya a estas alturas de la película, y la presencia de la decisiva cronoescalada hoy que condiciona la puesta es escena de los ciclistas, hizo que los tambores de guerra entre los aspirantes a la gloria el domingo en Roma no sonaran hasta los últimos metros del día.
Una etapa temida en el pelotón, que el propio líder afrontaba preparado para “vivir mi día más duro sobre la bicicleta” y que iba a ver como el colombiano Santiago Buitrago era el que regulaba mejor sus fuerzas para lograr una victoria de prestigio, la segunda para el ciclismo colombiano en este Giro tras la de Einer Rubio (Movistar) y la segunda que el de Bogotá lograba en Italia tras la del año pasado en Lavarone. El corredor del equipo Bahrain sucedía en el triunfo a su compatriota ‘Lucho’ Herrera, que ya venció en este coloso de los dolomitas en 1989, y acabó siendo el más fuerte de una potente fuga. Buitrago y Derek Gee mantuvieron una dura batalla en los kilómetros finales de la ascensión alas Tres Cimas de Lavar e do (7,2 km al 7,6% y con los últimos 4 kilómetros al 12%), y al final fue el colombiano el que se llevó el triunfo ante el canadiense, una de las revelaciones del Giro y el corredor que más kilómetros ha recorrido en fuga. Estuvo también en la escapada Carlos Verona. Un día más el integrante del equipoMovist ar tuvo piernas, aunqueal final tuvo que levantar el pie en una fuga en la que también fue víctima del atropello por parte de un coche del equipo AG2R que posteriormente fue expulsado de la carrera.
In e os controlaba el grupo de los notables, con los UAE de Joao Almeida y los Jumbo-visma de Primoz Roglic atentos. La carrera avanzaba y se tensaba la cuerda, hasta que en las rampas más duras de la subida final Roglic pasó al ataque. No fue un ataque seco y letal, ya que Thomas se pegó a su rueda. Sí que dejó a Almeida, pero después el luso llegó a la altura de los dos, hasta que el líder galés, confiando en sus fuerzas, decidió activar el modo ataque.
Ahora sí que al me ida ce día. roglic se agarró al manillar y no desistió. Pareció en algunos momentos que Thomas podría dar una gran estocada a Roglic antes de la cronoescalada, p ero roglic es mucho roglicynob ajó la cabeza, llegó a la altura de Thomas y al final arañó tres segundos que pueden valer su peso en oro, o no. La suerte está echada y el podio de roma se decidirá en los 18 kilómetros de una crono que se espera épica ●
Thomas quiso responder en primera persona al ataque de Roglic y erró