BARÇA DE CRISTAL
→ Tras llegar a mandar por 16 puntos, el equipo azulgrana se deshizo en pista del Panathinaikos → Los de Grimau pierden la segunda plaza y ven cómo peligra la ventaja de campo en los playoff
→ El Barça más irregular de los últimos tiempos se ha complicado mucho el futuro en la presente Euroliga al perder en su visita al Panathinaikos un partido que llegó a dominar por 16 puntos en la primera mitad. Los griegos, apoyados en los puntos de Nunn y un incombustible Sloukas, remontaron con un parcial de 55-30 tras el descanso para ganar por 89-81.
Con esta derrota el equipo de Roger Grimau no solo pierde la segunda posición en la clasificación que ha mantenido a lo largo de casi toda la temporada sino que baja hasta la cuarta, perjudicado también por la victoria del Mónaco sobre el Valencia (79-78). Panathinaikos y Mónaco igualan el balance del Barça (20-11) pero le adelantan por tener mejores resultados en los partidos que involucran a los tres. Caer fuera de los cuatro primeros significaría perder la ventaja de campo en playoff.
Tras la inesperada derrota en el Palau contra el Breogán (85-88) y el doloroso revés ante el Fenerbahçe de Jasikevicius hace solo dos días (88-74), durante muchos minutos el Barça parecía determinado a dar un golpe sobre la mesa en el OAKA. Liderado por un intenso Satoransky, el equipo azulgrana empezó maniatando el ataque local y anotando con facilidad apoyado en su dominio del rebote y las recuperaciones de balón, que le permitían salir con velocidad. El Barça tomó el control en el primer cuarto con un parcial de 0-9 que le permitió colocarse ocho (11-19) y se escapó en el segundo con un parcial aún más contundente, un 0-17 que colocó la máxima ventaja azulgrana a los 16 minutos (24-40).
El Barça mantenía una cómoda renta al descanso (34-46) pero a su regreso de vestuarios su imagen cambió por completo. El doctor Jeckyll de la primera mitad dejó paso a Mister Hyde, una transformación tan radical como inespearriba rada. El hundimiento azulgrana fue de los que hacen época.
Sloukas se sacó un truco tras otro de su chistera y Mathias Lessort y Dinos Mitoglou se convirtieron en sus escuderos en una remontada que puso a los griegos por delante en el minuto 28 (56-55).
Abrines lo intentó con sus triples (60-64) pero el duelo ya estaba cuesta abajo para el equipo de Ataman, que empezó a meter todos los tiros de tres que hasta entonces se le habían negado. Ningún jugador del Barça, ni siquiera un Ricky mucho menos clarividente de lo habitual, logró tirar del equipo.
La única nota positiva es que el Barça logró salvar el ‘basket average’ particular pues perdió por los mismos 8 puntos por los que ganó en el Palau ●