ARROLLADOR
→ El Barça intenta olvidar sus tres últimas derrotas con un convindente triunfo en Badalona → El Joventut recibió con cariño a Ricky y Parra pero después estuvo lejos de su gran rival
→ El Joventut pagó los platos rotos de la mala semana del Barça, que después de tres derrotas seguidas (Breogán, Fenerbahçe y Panathinaikos) necesitaba recuperar sensaciones y reencontrarse con la victoria. En Badalona el equipo azulgrana tomó rápido el control y, a pesar de una buena reacción verdinegra en el segundo cuarto, acabó imponiendo su ley con facilidad ante un rival que notó de forma decisiva la ausencia de Ante Tomic, en Croacia a causa de la muerte de su padre. El 75-93 final explica bastante bien la diferencia de recursos y de calidad que se vio sobre el parquet del Olímpic de Badalona.
Sin Tomic, lo peor que le podía pasar a la Penya era perder tras menos de cuatro minutos a su otro gran líder, Andrés Feliz, que se tuvo que ir al banco tras dos faltas muy rápidas. Falto de referentes, el joven equipo verdinegro se quedó sin ideas en ataque y la buena defensa del Barça hizo el resto.
Ricky Rubio, que junto a Joel Parra y Nico Laprovittola habían sido recibidos con un cariñoso vídeo en su regreso a Badalona, aprovechó la titularidad para dar una lección magistral de dirección, eligiendo siempre la mejor opción y acelerando o frenando el ritmo del Barça en función de lo le convenía al equipo.
El primer estirón azulgrana (1021 en el minuto 8) pudo ser respondido por la Penya, que a base de triples empató el partido a inicios del segundo cuarto (28-28) y llegó a tomar una breve delantera en el minuto 15 aprovechando uno de sus numerosos rebotes ofensivos (34-33). Sin embargo, la nueva marcha al banquillo de Feliz con tres faltas frenó el arreón verdineque gro y permitió al Barça recuperar las riendas al descanso (40-45).
Darío Brizuela se encargó de romper el partido para el Barça en el tercer cuarto, en el que anotó 11 de sus 18 puntos. El escolta vasco firmó los cinco primeros puntos del cuarto y el Barça, a pesar de los constantes intentos de la Penya de volver al partido, ya siempre pareció un escalón o dos por encima de los locales, cuya única vía fiable de anotación era Brodziansky (18).
El Barça inició el último cuarto 14 puntos arriba (55-69) y acabó de rematar a la Penya con un par de triples de Álex Abrines. Todos los nacionales del equipo azulgrana brillaron en el Olímpic excepto Willy Hernangómez, mucho más fallón de lo habitual y que cerró el partido recibiendo un tapón de Ian Platteeuw, que acababa de saltar a pista para convertirse en el segundo jugador más joven en debutar con la Penya (16 años y 142 días) ●