La primera ciudad republicana
Eibar fue el primer Ayuntamiento de España en proclamar la II República en 1931. No se sabe a ciencia cierta si ocurrió por un error de comprensión o por la valentía y las ganas que tenían sus habitantes de recuperar la democracia.
Según la versión de descendientes de los protagonistas de este momento histórico, todo se precipitó cuando un emisario le comunicó al teniente de alcalde del Ayuntamiento de Eibar, De los Toyos, “Se está preparando la República”, y éste entendió: “Se está proclamando la República”. Se cuenta que este error fonético pudo llevar a preparar, horas antes que el resto de ciudades españolas, la constitución del nuevo modelo de Estado y a ser el primer Ayuntamiento en izar en su casa consistorial la nueva enseña nacional, la bandera tricolor, para dar la bienvenida a la recién llegada Niña Bonita.
También se cree, según el testimonio de Toribio Echevarría, creador de la cooperativa Alfa, que fueron unos camioneros que transportaban pescado desde San Sebastián a Madrid, Barcelona y Bilbao quienes transmitieron a los socialistas Juan de los Toyos y Enrique de Francisco la inminente proclamación de la República en todo el país.
Hay otra versión más documentada, aportada en su día por el dirigente socialista Indalecio Prieto, según la cual enviaron de madrugada como emisario al dirigente de Acción Republicana Joaquín Berasaluce para comunicar a los compañeros de Eibar la necesidad de acelerar los acontecimientos.
Eibar, ciudad guipuzcoana puzcoana de 13.000 13 000 habitantes en 1931, tenía una tradición industrial armera muy influenciada por el socialismo vizcaíno del siglo XIX. Aquella madrugada, a las 5: 00 horas, se llamó de urgencia a todos los concejales para proclamar la República. Para entonces, “todo el pueblo estaba en pie”, reunido en la plaza de Unzaga. Se cree que hacia las 6: 00 horas se izó la bandera tricolor en la balconada consistorial. En “homenaje de justicia y tributo de reconocimiento”, el presidente del Gobierno provisional de la República, Niceto AlcaláZamora, concedió a Eibar el título de “muy ejemplar ciudad”, una distinción que naturalmente le retiró el franquismo, pero que ha sido recuperada con la restauración de la democracia en la actualidad.