Los enigmas del círculo de piedra
Durante décadas, las guías oficiales de Stonehenge ( Wiltshire, Inglaterra) han estado llenas de cifras, datos y teorías diversas: aquellas que rodean al mayor monumento prehistórico del mundo. Lo que los folletos no mencionan, sin embargo, es la reconstrucción sistemática a la que se vio sometido el lugar – a la derecha, una imagen tomada en 1911– a lo largo del siglo XX. Distribuida en cuatro círculos concéntricos, la formación megalítica conoció restauraciones desde 1901 hasta mediados de la década de 1950. Christopher Chippindale, archivero arqueológico de la Universidad de Cambridge, es tajante al respecto: “No hay mucho de lo que vemos en Stonehenge que no se haya tocado de alguna manera”. Aun así, el misterio sigue rodeando a este gran monumento prehistórico cuya finalidad se ignora, aunque se supone que se utilizaba como templo religioso, lugar de culto funerario u observatorio astronómico ( o todo ello combinado). Se han encontrado 300 enterramientos de restos humanos previamente cremados, datados entre los años 3030 y 2340 a. C. Por el número de entierros para un período tan largo, se estima que se trataría de un cementerio para personas escogidas. Arriba, la foto muestra a trabajadores realizando, en 1919, una de las restauraciones de Stonehenge.