“No nos representan”

Otra fecha: 15 de mayo de 2011. Ese día hubo una serie de manifestaciones por toda España contra la situación social ocasionada por la crisis económica de 2008, los recortes y las ayudas públicas a los bancos. La indignación y el descrédito de las instituciones públicas y los políticos se mascaban en el aire. La mayor concentración fue la de la capital. Aglutinó a más de 20.000 ciudadanos y muchos de ellos acamparon esa misma noche en la Puerta del Sol con la intención de permanecer allí hasta la jornada electoral que tendría lugar el 22 de mayo (el gobierno estaba liderado por entonces por el PSOE, con José Luis Rodríguez Zapatero como presidente y Alfredo Pérez Rubalcaba como ministro del Interior). Sin embargo, el 17 de mayo unos 50 policías entraron en Sol de madrugada y procedieron al desalojo de los acampados. Por la tarde, los ‘indignados’, como se les conoció (por el libro ¡Indignaos!, de Stéphane Hessel), volvieron a ocupar la plaza: habían constituido una asamblea y proclamado unos objetivos y propuestas políticos. El movimiento se replicó en otras plazas y ciudades españolas. Se participaba en debates, se compartían inquietudes, se gestaban ideas de futuro y repulsa y se agitaban las manos en señal de aplauso. Manos levantadas en el aire también. El 12 de junio, la asamblea de Sol decidió desalojar la plaza voluntariamente, después de haberla ocupado durante 28 días. “¡No nos vamos, nos expandimos!”, gritamos.