Otros sitios históricos en peligro
No se trata solo de Palmira, Alepo o Dura Europos. El país es cuna de otras muchas riquezas patrimoniales que están siendo devastadas.
EBLA. Una de las ciudades más antiguas de la historia, en la que se han hallado tablillas cuneiformes de hace 4.000 años, ha sido objeto del saqueo arqueológico del Dáesh y también de ocupación militar, al estar en terreno elevado.
HOMS. Ciudad natal del emperador romano Heliogábalo, fue proclamada capital de la revolución por los rebeldes sirios. El Frente AlNusra, de tendencia islamista, la ocupó, usó su laberíntica red de catacumbas romanas y destruyó multitud de monumentos religiosos cristianos. Ha sido reconquistada, pero a costa de una enorme destrucción urbana.
MONASTERIO DE SAN ELIÁN. Situado en la ciudad de Al Qaryatain y dedicado a la memoria del mártir sirio Elián –Julián– de los primeros tiempos del cristianismo, fue destruido con buldóceres por el Dáesh en 2015, que no dudó en grabar las imágenes de la barbarie y divulgarlas. Al quedar reducido a escombros, aparecieron los restos contenidos en un antiguo sarcófago, que podrían pertenecer a alguna personalidad religiosa.
BOSRA. Esta ciudad del sur de Siria tiene el título de Patrimonio de la Humanidad desde 1980. Fue capital de la provincia romana de la Arabia Pétrea y, ya en la época islámica, importante lugar de paso para los peregrinos que se dirigían a La Meca. Su anfiteatro romano ha sido utilizado con fines militares y la mezquita de Al-Omari (siglo VIII) sufrió impactos de mortero.