HACE 130 AÑOS

BERTHA BENZ, PIONERA DE LAS EXCURSIONES EN AUTOMÓVIL.

Ni corta ni perezosa, sin consultarlo con su marido Karl, Bertha Benz salió de excursión desde Mannheim la mañana del 5 de agosto de 1888 acompañada por sus dos hijos mayores, de quince y trece años –en la imagen, con ambos, en una recreación–. Su idea era ir a Pforzheim, donde vivía su madre. Así, recorrió 106 kilómetros en el flamante Benz Patent-Motorwagen Número 3. En realidad, Bertha también quería demostrar a su esposo que el automóvil que él había creado y en el que ella había invertido podía ser útil para todo el mundo.

Antes de ello, nadie había usado un vehículo más que en circuitos cerrados, en distancias cortas y con asistencia de mecánicos. En aquel viaje tuvieron que resolver numerosos problemas antes de llegar a su destino, al anochecer, como comprar bencina –pues el coche no tenía depósito– y refrigerar el motor con agua de las fuentes. Hasta sus hijos hubieron de empujar el vehículo para subir alguna cuesta en la que su potencia no era suficiente.