¿QUÉ ES EL LUJO HOY?
IMAGINAD UN VENDEDOR DE COCHES DEL SIGLO PASADO, cuando un cliente con capacidad de compra premium se acercaba a un concesionario buscaba elevalunas eléctricos, cierre centralizado, asientos de piel, volantes de madera e incluso pequeños frigoríficos. Con el nuevo siglo llegaron los nuevos sistemas de seguridad y comunicación. Muy pronto el GPS, que raramente bajaba de 3.000 euros de coste adicional, abrió la puerta al primer capítulo del nuevo concepto del lujo. El segundo nació pasados unos años, cuando Apple inventó el iPhone. Sobra explicar la revolución que ha supuesto este dispositivo y otros similares. El reto de las marcas ha sido conseguir que el conductor siga comunicado de forma responsable y segura. Y la tercera es la inteligencia artificial: conducción autónoma, seguridad preventiva y tecnologías capaces de interpretar nuestros hábitos y gustos.
Este contenido ha supuesto una revolución a la hora de definir los equipamientos. En primer lugar, nos encontramos los futuristas diseños de interiores para posicionar componentes que simplemente no existían. Valoro mucho que los diseñadores hayan sabido triunfar a través de la simplicidad. El papel protagonista de la mujer en los departamentos de diseño tiene mucho que ver, pero de esto hablaremos como se merece en otra ocasión. Y para finalizar llega el protagonista, el cliente. Los extras que diferenciaban a los coches hoy son equipamiento de serie en cualquier segmento y marca. La piel ha sido sustituida por tejidos creados por avanzadas tecnologías que aportan sensaciones únicas. Pero lo más importante es cualquier euro que se gaste en seguridad. Freno de emergencia, luces inteligentes, control de velocidad… Hay múltiples opciones y cada día más económicas. No dudéis en invertir en el verdadero lujo, porque no olvidéis que el verdadero lujo es vivir y sobrevivir.