ERICH VON DÄNIKEN NO FUE EL PRIMERO
ESTE ESCRITOR SUIZO, EL DIVULGADOR MÁS FAMOSO DE LA HIPÓTESIS DE LOS ALIENÍGENAS ANCESTRALES, SOLO ES UNO MÁS ENTRE MUCHOS FARSANTES.
NADA ES ORIGINAL EN VON DÄNIKEN.
Aunque la idea de que seres extraterrestres influyeron en nuestro pasado se atribuye habitualmente a este autor nacido en 1935, su primera promotora fue Helena Blavatsky (1831-1891), la inventora de la teosofía, un confuso amasijo religioso-filosófico que llegó a ser popular. Varios escritores mantuvieron viva la teoría hasta mediados de los 60. En esos años, Von Däniken trabajaba en un hotel, y fue entonces cuando leyó El retorno
de los brujos (1960), un best seller en el que Louis Pauwels y Jacques Bergier sostenían que las estatuas de la isla de Pascua (foto), las líneas de Nazca, los restos de Tiahuanaco (una cultura precolombina), las pirámides egipcias y otros vestigios arqueológicos se relacionaban con antiguos visitantes alienígenas y civilizaciones desaparecidas presuntamente avanzadísimas.
Robert Charroux, otro autor esotérico, publicó en 1963 Cien mil años de historia
desconocida, un texto que seguía una línea similar para explicar la destrucción de Sodoma y Gomorra, el Arca de la Alianza y otros mitos. Erich von Däniken se subió a este carro en 1968 con su primer y exitoso libro:
Recuerdos del futuro. Sus similitudes con el de Charroux son descaradas. Tanto que para evitar un juicio por plagio, su editorial tuvo que incluir la obra de este como referencia bibliográfica en la siguientes ediciones.