Ideas preconcebidas
En España, algo más del 10 % de la población es extranjera –5.025.264 personas a principios de 2019, según el Instituto Nacional de Estadística–, lo que pone en duda la tesis de que nuestro país está siendo invadido por los inmigrantes, como sostienen algunos colectivos. Bajo estas líneas se citan los países de los que proceden la mayoría de ellos y el porcentaje respecto al total.
“Entre 2011 y 2015, por ejemplo, el saldo migratorio fue negativo; esto es, se marcharon más personas que las que vinieron —explica Juan Iglesias, un experto de la Universidad Pontificia Comillas, en Madrid—. De hecho, los inmigrantes que tratan de cruzar la frontera ilegalmente, como los que lo hacen en patera, no llegan al 10 % del total. La mayoría entra por el aeropuerto de Barajas”. Este destaca, además, que quienes se mueven desde el sur a los países del norte no son los habitantes más pobres, ya que estos no tienen los medios para hacerlo. Estos suelen desplazarse exclusivamente en las regiones meridionales. “Emigrar internacionalmente resulta caro. Quienes pueden permitírselo lo hacen por razones económicas y de mejora laboral. Otros se ven forzados por guerras o desastres humanitarios”, recalca.
La inmigración ilegal ha descendido en toda Europa un 30 % durante los siete primeros meses de 2019, especialmente en el Mediterráneo occidental, según Frontex, la agencia europea de control de fronteras.