¿QUÉ ES LA
Así se conoce en amhárico, una de las lenguas que se hablan en el norte de Etiopía, la iglesia de San Jorge –bajo estas líneas–. Esta forma parte de un conjunto de once templos rupestres excavados en las colinas próximas a la ciudad etíope de Lalibela.
La hipótesis más extendida considera que la Biet Ghiorgis se erigió entre los siglos XII y XIII, mientras gobernaba la región la dinastía Zagüe, cuyos soberanos se empeñaron en recrear la Tierra Santa de forma simbólica en sus dominios. Esta iglesia, en concreto, fue tallada a partir de un único bloque de roca volcánica y presenta una planta con forma de cruz griega. Por ello, resulta muy llamativa cuando se avista desde el aire, pues se yergue en un pozo. Mide doce metros de lado y otros tantos de alto y se calcula que debieron retirarse 3400 m3 de materiales para esculpirla.
Este templo es un importante centro de peregrinación para los fieles ortodoxos etíopes.
Los dinosaurios fueron los dueños de los ecosistemas terrestres hasta su extinción, hace 66 millones de años. Pues bien, el paleontólogo Nizar Ibrahim y sus colegas de la Universidad de Detroit Misericordia (EE. UU.) han confirmado que los Spinosaurus aegyptiacus –los mayores dinos carnívoros conocidos, de 15 m de largo– también colonizaron ciertos hábitats acuáticos.
Hace unos 100 millones de años, los cazaban peces sierra, tiburones o celacantos en los sistemas fluviales que habitaban.
Tal hipótesis despertaba muchas dudas en la comunidad científica, pero, según explican Ibrahim y su equipo en Nature, un estudio detallado de los restos de un espécimen encontrado en los lechos de Kem Kem, en Marruecos, prueba que podían nadar propulsándose con la cola, una adaptación que les permitía atrapar presas en los ríos que por entonces cubrían la región.