Una base de diez
Un cuidado interiorismo necesita de un continente impecable que permita poner en valor muebles y obras de arte. En esta vivienda (arriba) se ha conseguido con una boiserie de madera lacada en blanco sobre la que resaltan el cuadro de Jordi Alcaraz y un móvil de Juan Marín. El mobiliario es un mix de estilos, con dos butacas fifties –la del cojín rojo es el famoso modelo Platner, de Knoll– frente a un sofá actual de Blasco & Blasco. Abajo, un comedor con mesa y sillas clásicas a las que complementa la lámpara de estilo vintage. Al lado, estancia enteramente revestida en madera y laca blanca.